capitulo 3

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Después de una hora, por fin ve llegar a lo lejos un coche y una sensación de alivio invadió su pecho.

Pero antes de poder moverse para pedir ayuda, el coche se orillo y estaciono a unos metros de ella.

Se abre la puerta del piloto y siente como su corazón empieza a latir rápidamente, como si su objetivo es salir de su pecho.

El sujeto baja del coche y ella lo ve asombrada manteniéndose inmóvil, mientras el se acerca poco a poco, un hombre alto, piel morena, cabello castaño con unos reflejos dorados, lentes de sol, chaqueta de cuero marrón, pantalones negros, debajo de la chaqueta una camisa blanca y zapatos de vestir.

Alicia Mondragón

No lo podía creer, después de años sin verlo aparece nuevamente en mi vida, y para ayudarme a reparar mi coche, siempre tan guapo y bien vestido, el hombre perfecto para todas, bueno estéticamente hablando.

Cuando se detuvo frente a mi y me ofreció su mano para estrecharla, llegó a mi nariz ese aroma exquisito que lo caracterizaba, y derretía a cualquier mujer.

Estreche su mano un poco nerviosa, para ser sincera.

El volteo a ver el coche.

-en apuros eh, puedo ayudarte?

-por favor suspiro viendo el coche llevo horas esperando por ayuda

Suelto su mano y camino hacia mi coche, lo veo levantar el capo, y me sumerjo en mis pensamientos.

Es tan lindo, ¿como me encontró? Hacia donde iba? Habrá pensado en mi en algún momento? Habrá pensado en lo que tuvimos?

Ésas y muchas otras preguntas invadian mi mente mientras lo veía reparar el coche.

-listo súbete a ver si prende
 
Suspira y yo me subo al coche girando la llave para encender

- gracias Dios

-que bueno jajaja

Bajo del auto encendido a darle las gracias, cuando el me abraza repentinamente, no me lo esperaba, fue tan cálido, tan familiar, hace mucho que no lo abrazaba,  ya extrañaba la sensación de estar entre sus brazos, sentirse a salvó con el era casi imposible.

El me suelta y tuve que hacer lo mismo y despegarme de el, aunque sinceramente no quería, el aún provocaba esa sensación en mi, aún me gustaba.

Sonrío levemente y el lo nota.

-que pasa? Estás recordando viejos tiempos?

Me sonroje un poco inevitablemente

-para nada

Aparté la mirada de manera que era muy obvio que aún me ponía nerviosa.

-segura? Porque tus gestos no dicen lo mismo.

Toma mi mandíbula haciendome levantar la mirada y acercándose un poco Hacia mi, enseguida mis alarmas se activaron, y empecé a sudar, maldita sea siempre me pasa esto cuando me pongo muy nerviosa,
Pero hay que mantener la calma, no hay que perder el control.

-pues te equivocas, mis gestos no dicen na...

Me beso!!! E inconscientemente cerré los ojos disfrutando del momento, sus labios se sentían tan bien después de tanto tiempo, ahora sí invadieron mi mente esos recuerdos de nosotros en las ferias, festivales de carnaval, largas platicas en nuestras citas, esas noches de pasión en su casa cuando sus padres salían de fiesta, todos esos recuerdos se hicieron presentes en mi mente, hasta que el beso ya era muy largo y paramos.

El me vio a los ojos y se sonrojo riendo un poco.

-disculpa, no se que paso por mi mente, fue un arrebato perdón

Se excuso alejándose de mi, eso me desconcertó pero preferí evadir eso y lo detuve tomandolo del brazo.

-oye ... gracias por ayudarme con el coche, sin ti aún estaría varada aquí en medio de la nada

Le di una sonrisa amable tomandolo de los brazos.

-es que me da pena contigo por lo que hice, no debí hacerlo no se que me pasó

Acaricie su mejilla gentilmente

-tranquilo, no me voy a molestar por eso, además me da gusto verte después de tanto tiempo.

-lo dices de verdad? Es que me siento muy apenado, se que no debí hacerlo.

-jaja tranquilo, además no besas mal.

Bajo la mirada.

-hey

Me toma del mentón para que Levante la mirada.

-no bajes la mirada, me gusta ver tus hermosos ojos verdes.

Una pequeña risa dejo sus labios al pronunciar lo último.

Nos quedamos viéndonos a los ojos unos segundos hasta que el suspiro y salí del trance en el que me ponían sus ojos ámbar, los mismos que contemple durante horas en el pasado y que ahora estaban frente a mi.

-emmm yo iba para está dirección me ayudas a llegar?

Miro su celular algo extrañada, era mi dirección.

-pero es mi dirección como...?

Camila!!! Fue ella, tuvo que haber Sido ella es una de las dos personas que sabían mi dirección, bueno ahora son tres, y no creo que Victor se la haya dado ya que no son muy amigos que digamos.

-sip, es tu dirección, Camila me la envió por WhatsApp y... no pude esperar para visitarte, te quería llegar de sorpresa pero... ja toco auxiliarte y se arruinó la sorpresa.

El sonrio y me di cuenta que aún estaba enamorada, pero me negaba a volver al pasado, aunque lo extrañará mucho el era parte de lo que quería dejar atrás y no podía permitir que entrara de nuevo a mi vida tan derrepente.

Alicia, Amor Y Obsesión ★las Cosas No Siempre Son Lo Que Parecen★Donde viven las historias. Descúbrelo ahora