CRÉEME, TE AMO SOLO A TI ✓ [FELIX Y T/N]

Capitulo 13

POV T/n:

Alguien abrió la puerta pero no pude ver quién era porque estaba acostada con la cabeza hacia abajo.

—Buenos días —dijo mi chico

—Hola —dije aún en mi posición

—Que bueno que despertaste, te traje el desayuno —lo mire y tenía en sus manos una bandeja con un sándwich y un vaso de jugo de naranja, acompañado de una florecita amarilla.

Reí leve y me senté en la cama, Felix se sentó frente a mí y colocó mi desayuno entre mis piernas, tome la flor y la pasé por el rostro de Felix mientras el reía, se acercó y dejó un pequeño beso sobre mis labios, se acostó a mi lado y comencé a desayunar, al terminar dejé la bandeja en el piso y me acosté mirando a Félix.

—¿En la madrugada te fuiste a tu cama? —le pregunté

—No, me quedé contigo hasta casi ahora mismo, pero me levanté para bañarme y prepararte el desayuno —me dijo sonriendo

—¿Ya desayunaste? —le pregunté

—Si —me sonrió y me abrazó

—Amo estar contigo —le dije

—Yo también amo estar contigo

Dejó de abrazarme y nos levantamos, tendí mi cama y baje. Mi hermano estaba viendo la tele y al parecer mis padres no estaban.

—Buenos días —abracé por detrás a Minho

—Buenos días hermanita

—¿Dónde están nuestros padres? —le pregunté al castaño

—Se fueron a Alemania a un negocio, regresan el domingo en la tarde —me respondió

Felix me miró con cara de pervertido y reí

—Hoy iré con Felix y sus amigos a un bar —le dije a mi hermano

—Que bueno, ¿también puedo ir? —pregunto a Felix y este le respondió con un asentimiento nasal

Comenzamos a reír y hablar en la sala hasta que preparé una pasta y almorzamos, Felix se fue a su habitación con Minho y yo me quedé en la mía con mi PC esperando a que se hiciera más tarde e ir a caminar un poco y después venir y cambiarme para ir al bar.

El reloj marcaba las 5:20 p.m así que decidí buscar una chaqueta y ponerla por encima de mi croptop.

Sentí a Minho riendo con Felix, así que salí de la casa y comencé a caminar hasta llegar a un parque y me senté a tomar un poco de brisa mientras me tomaba algunas selfies, me compré un helado de chocolate y después de eso camine  hasta la casa.

Al llegar eran las 7:29 p.m, llegué a la cocina y me comí algunas uvas, subí rápidamente las escaleras y me adentré a mi habitación, esta vez iba relajada –por suerte ya se había ido el período–, sin apuro para vestirme, me duché y comencé a buscar un vestido, encontré uno negro, un poco corto, con la espalda totalmente descubierta hasta parte de mi espalda baja, era de tirantes y tenía algunos en la parte baja de mi espalda adornando un poco al vestido, no podía ponerme sostén con ese vestido, pero la tela no era tan fina, me coloqué unos tacones de plataforma alta, de tiritas que había que sujetar hasta un poco más abajo de mis rodillas, eran tacones cuadrados y negros. Me hice unas ondas en el cabello y comencé a maquillarme.

Me coloque un poco de rímel, rubor, un poco de base en el rostro y por último, un labial transparente de menta. Escogí una cartera de mano, negra igual. Me rocié mi perfume favorito para las noches por mi cuello y mi muñeca.

Al salir de mi habitación vi a Félix a punto de bajar las escaleras, con su cabello desordenado pero a la vez peinado, tenía un pantalón negro que marcaba perfectamente sus atributos, una camisa tres cuartos blanca dejando ver sus venas de los brazos marcadas, un reloj en su mano izquierda, en la cual, también traía anillos, en el pulgar y el dedo del medio. En su mano derecha tenía solamente uno en el dedo índice. Realmente atractivo, sensual y atrevido mi chico pecoso.