Un día más sola

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Al llegar al restaurante pude ver a mis dos amigas sentadas en la primera mesa y al verme se les dibujó una gran sonrisa en el rostro, abrí la puerta y senti como alguien me prohibía el paso.

Al subir mi mirada vi que era Zack y por la forma en la que me miraba, no debía ser nada bueno lo que me tenía que decir.

- Se puede saber porque no me has avisado para traerte hasta aquí? me llamo tu madre preocupada no sabia donde te habias metido, se puede saber donde demonios te habías metido?- me miro muy enfadado.

pero quien se creia el para hablarme de ese tono? ahh ni que fuera mi padre.

- A caso te importa? No eres nadie para hablarme de esa forma- Le dije a la vez que di un paso hacia delante para pasar pero el seguia ocupando el paso.

Era la primera vez que le hablaba asi a Zack, será por el cabreó que llevaba con el imbécil de la bici?

- Bien, tienes razón no soy nadie para hablarte así ah bueno si soy TU HERMANASTRO-dijo haciendo sonar esas palabras muy fuerte- Bueno solo quiero que sepas que cuando me necesites para algo te recordaré que no soy nadie para ayudarte- dijo y se apartó de la puerta con una sonrisa en el rostro.

Así que avancé a la mesa donde estaba Emma y Anna y sin dudar nos dimos un gran abrazo las tres juntas, siempre que nos vemos nos damos un gran abrazo.

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