Capitulo 3

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Poco después de lanzar ese grito, Issei se dejó llevar, cayendo por el gran abismo helado sin ninguna preocupación, contrastando totalmente con su lado dragon, que prefería el calor extremo, su otro lado prefería el frio, lo cual le ayudaba a pensar.

Si bien, Serafall y toda la familia Sitri lo apoyaron a capa y espada cuando todo el inframundo le dio la espalda, la inseguridad al fondo de su corazón no le dejaba admitir que se había enamorado de Serafall.

Ese pensamiento provoco que Draig lo golpeara con su propia mano, ya aburrido por las estúpidas inseguridades del castaño.

Gracias a esto y sabiendo que seguir dándole vueltas al asunto no lo llevaría a nada, prefirió dejar que todo siguiera su curso, algo que nuevamente causo que Draig lo golpeara con su propio brazo.

Decidiendo que había estado cayendo por mucho tiempo, intento sacar sus alas, solo para seguidamente ser envuelto por una cúpula de llamas color purpura, lo que detuvo su caída, derritiendo el hielo que caía sobre él.

Esto lo dejo sorprendido y totalmente confundido, sorpresa que aumento al ver como lentamente una pequeña cruz cubierta por una luz dorada aparecía frente a él.

Reconociéndola, lentamente la tomo en sus manos, causando que una gran energía recorriera por su cuerpo al momento de tocarla, para seguidamente una gran luz iluminara la zona.

Mientras esto sucedía, en el inframundo había un completo caos, poco después de la explosión en los territorios de la mansión de Leviatán, todo guardia o guerrero de todas partes del inframundo se dirigió hacia el lugar de la explosión.

Incluso los Maou Lucifer y Beelzebub hicieron acto de presencia en el lugar, quedando sorprendidos al ver la gran cantidad de cadáveres de múltiples guardias tirados por el lugar, con claros indicios de poder de la destrucción en sus cadáveres.

Guardia: ¡¡¡Maou Lucifer...!!! (Grito mientras se acercaba a los dos Maous, mientras que un grupo a sus espaldas retenían a una pelirroja que ambos Maous reconocieron rapidamente)

Sirzechs: Lleven la a los calabozos de la mansión de Lucifer, no quiero que nadie la visite o tenga contacto con ella hasta que hable personalmente con ella... (Hablo en un tono sumamente enojado, mirando con decepción a Rias, la cual a este punto estaba derramando lagrimas en un intento de victimizarse)

Con un asentimiento, los guardias que sostenían a la pelirroja le colocaron esposas anti-magia, para seguidamente usar un circulo de transporte, desapareciendo del lugar.

Ajuka: ¿Algo mas que tengan que reportar...? (Hablo viendo como su amigo se había quedado estático en su lugar)

Guardia: Al parecer dos miembros de su nobleza la intentaron detener, pero terminaron derrotadas, no tienen daños mayores, pero tendrán que recibir cuidados médicos... (Hablo mientras veía como unos cuantos de sus compañeros levantaban con cuidado a las dos mujeres, las cuales apenas estaban consientes)

Ajuka: Bien, llévenlas a un centro medico y custódienlas, no permitan que nadie las visite o hable con ellas hasta que alguno de nosotros lo haga... (Hablo en un tono de mando, recibiendo una afirmativa de parte del Guardia, el cual rapidamente les transmitió la orden a sus compañeros) ¿Esta todo bien, Sirzechs...?

Sirzechs: No puedo creer que después de todo lo que ocurrió, ella... (Hablo en un tono entre enojado y dolido, solo para seguidamente soltar un suspiro) Que algunos guardias notifiquen a los civiles que fue una falsa alarma, los demás, recojan los cuerpos de los caídos y notifiquen a sus familias... (Hablo en un tono de mando, recibiendo una afirmativa de los guardias a su alrededor)

Después de esto, el pelirrojo se retiro mediante un circulo de transporte, dejando a Ajuka en el lugar, quien ayudaría a los guardias, un tanto preocupado por su amigo.

Infinite Dream (En reescritura)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora