Shido Retsudent

Eres el salvador de Konoha

Después de aquella diversión con el clan de los Akatsuki Shido se dirigió a una colina para ver el hermoso paisaje. Mientras que Mio lo siguió.

Shido: *sonriendo* y pensar los duros años que estuve aquí, soy feliz. *Susurro*

Mio: Shin, quiero hablar contigo. *Seria*

Shido: ¿de que quieres hablar, Mio? *Sin mirarla*

Mio: de ti. ¿Estuviste todo esté tiempo en este mundo?

Shido: si.

Mio: ¿entonces por que nunca volviste?

Shido: ¿para que volvería a ese mundo?, acá tengo amigos, hermanos, familia. *Sonriendo levemente*

Mio: Shin, necesito tú ayuda para detener a Westcott. Él...

Shido: ya él no les dará más problemas. Está muerto.

Mio: *en shock* p-primero robas, y ahora estás matando. ¿¡Que te pasa!?, ¡tú no eres así! *Gritando*

Shido: así es la vida, matas o te matan. *Mirándola con el Sharingan*

Mio: t-tanto has cambiado...

Shido: sino te gusta como soy... *Abriendo un portal*... Puedes irte.

Mio: Shin...

Shido: yo no soy como antes, después de aquella noche mi vida cambio. Y luego me sumi a la oscuridad. Creyendo que estaría solo en toda la eternidad, pensando en que fueras tú la única que me ayudaría pero no. No hiciste nada para ayudarme. Solo quisiste seguir tu maldito juego para matar a Westcott. Ni eso cumpliste. Mirame, comencé siendo el más débil y ahora soy el más fuerte, fácilmente podría derrotarte así como a las espíritus.

La peliplata se quedaría callada ya que todo lo que decía el Akatsuki era verdad. Es cierto que Shido estuvo en los peores momento pero ella no lo ayudo y no estuvo ahí para aconsejarlo o apoyarlo. Con un tan solo "no te preocupes, todo estará bien porque estoy aquí"

Shido: *suspiro* mejor me voy. *Empezando a caminar*

Mio se quedaría ahí, triste, en silencio y sin mirar a Shido. Mientras que esté solo caminaba al lado de ella.

Shido: no me vuelvas a buscar, lo nuestro termino.

El pelinegro dejaría aquel lugar y dejar sola a Mio, triste y rompiendose en lágrimas. Ella se reincorporo y camino hacia el portal que aún seguía activo para luego desaparecer. Pero lo que no sabían era que alguien los estaba observando. Tohka, Kotori y Miku estaban ahí, quien sabe cómo le hicieron para llegar ahí.

Tohka: ¡aquí es! *Feliz*

Kotori: ahora solo hay que pedirle perdón. Tch, así que era ese maldito aparato que nos estuvo controlando.

Miku: oigan. *Llamando su atención* ¿y como fue que se sacaron del control?

Kotori: *suspiro* cuando Shido lanzó esa bola de hielo "esa cosa" se congelo tanto que dejó de funcionar.

Tohka: yo porque estaba tomando conciencia en la pelea. Luego me lanzo con una de sus trucos y se rompio.

Kotori: ¿y tú Miku?