Aquel que Bailaba de Blanco.

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Un saludo primero,

da inicio a su danza.


Un grito certero,

el nombre te alcanza.


Comienza.

Y lo hace rápido,

sin tardanza.

Gira veloz en sus ejes

y clava la vista

con fuerza y templanza.


Con frío cálculo dirige

sus movimientos.

Un golpe seguido de otro;

Sus pies se deslizan ágiles

y espera el guerrero

oportuno momento,

en el que invisibles enemigos

caigan.


Es el baile de la Muerte,

envuelta en blanco.


Ya comienzan sus giros y saltos,

grita furioso, se planta fuerte.


Es éste el canto de la Mano Vacía.


Su cadera se desliza veloz,

A la vez que su puño,

cerrándose con arrebatadora firmeza

en fiero compás.

Sensato es aquel que se aleja de él,

Puesto que su mero toque destruye

con limpia presteza

los huesos y los rostros

de aquellos sin nombre.


Salta, gira,

sus piernas se empujan por sobre su

cadera hacia arriba:

Éste es el canto de la Mano Vacía.


Termina siempre en el mismo lugar

donde empezó,

pausa y tempo precisos como un

reloj.

Saluda de nuevo,

en silencioso respeto,

y al fin concluye

su muda reverencia.


El aviso de la Muerte,

blanca y seria,

ha sido nomás que

una simple advertencia.


Demostrado el guerrero su valía,

¡esta es la Forma de la Mano Vacía!


FIN.

Palabras: 180

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Palabras: 180.

Aunque El Mar nos Tire.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora