Ya eran casi las dos de la mañana y tú estabas acostada boca arriba escuchando música por un audífono en el sillón de tu sala esperando la llegada de Daniela.
Había salido a alguna fiesta con sus hermanas y prometió llegar temprano, pero no dijo cuándo era temprano. Tú no la acompañaste por que no era tu estilo de vida, y además no estabas de humor.
Sonó el timbre de tu casa y te levantaste lo más rápido que pudiste del sillón y corriste a la puerta.
Al abrirla viste a una Alejandra jetona con tu chica en sus brazos. Viste a una Daniela débil en los brazos de su hermana. —Toma, toda tuya.— la cargó de los hombros y te la dió. —¿Pero qué pasó?— dijste extrañada e intentando mantener tu equilibrio con todo el peso de Daniela sobre ti. —Está borracha, muy borracha.— sonrió Alejandra.
—Okay..., gracias Ale. Nos vemos, gracias.—...—¡De nada!—...— ¡Me saludas a Pau!— gritaste antes de entrar a tu casa.—A ver preciosa, vamos a subir arriba a nuestro cuarto pero quiero que pongas de tu parte por favor. Te voy a ayudar porque se que estás mareada pero quiero que me ayudes. ¿Okay?— pusiste su brazo alrededor de tu hombro. —¿Nuestro cuarto dijiste?— dijo emocionada —Si, Dany, ahora necesit...—...—¿Osea, dormimos juntas?— te interrumpió. —Si.— asentiste.
—Uuu— sonrió Daniela. Empezaron a subir las escaleras a un paso moderado para que la rubia no se tropezara. Al llegar a su cuarto acostaste a Daniela boca arriba y le quitaste sus botas. —No te muevas. Voy a ir por desmaquillante y por un cambio de ropa para ti.— dijiste antes de entrar al baño. Tomaste lo necesario y regresaste a su habitación.
Daniela se había quedado dormida.
—Ugh— te quejaste. —Dany...— sacudiste su hombro
—...linda, despierta.— Daniela se levantó a duras penas y al verte sus ojos se engrandecieron y te miraron fijamente. —¿Linda, yo?— sonrió —Si, ahora déjame desmaquillarte ¿Okay?— te subiste arriba de sus muslos para que el proceso fuera más sencillo —Claro— soltó una risita.Comenzaste por sus ojos, después su nariz, después el resto de su cara, y finalmente sus labios. Lo hacías con mucha delicadeza por que los labios eran la parte más sensible del cuerpo de Daniela. —¿Eres soltera?— preguntó de la nada. Te alejaste de sus labios y la miraste confundida. —No...estoy casada— levantaste tu mano izquierda para enseñarle un bonito anillo de diamante que ella te había comprado hace unos meses.
Dany abrió su boca en sorpresa y comenzó a llorar. Comenzaste a reír, tal vez a la rubia se le olvidó que ella estaba casada contigo.
—¡No te rías! ¿Que es tan chistoso?— limpió sus lágrimas. —Daniela, yo estoy casada contigo.— reíste más fuerte.
—¡¿Enserio?! Pruébalo, dame un beso ahora mismo.— te inclinaste hacía ella y le dejaste un suave y lento beso en sus labios.La rubia tocó sus labios y sonrió —Wow, gracias.—Le diste el cambio de ropa y le dijiste que se fuera a cambiar al baño. En esta ocasión no lo harías tu misma por que no querías confundirla tanto.
Te quedaste acostada en su cama esperándola y cuándo ella salió corrió y se aventó a la cama —¡DAME OTRO BESO!— gritó —Okay, okay, pero no grites.— reíste. Durante el beso Daniela comenzó a mover sus manos por tu pelo, después hacía tu cuello y terminaron en tus pechos.
Ella se separó apresuradamente del beso y preguntó — ¿Que son estos?— los apretó. —No los aprietes por que me duele.— soltaste una carcajada
—Son mis pechos, tu también tienes unos. — reíste —A ver— levantó su blusa y bajó la mirada — ¡DANIELA! —
reíste más fuerte. —En efecto, si tengo.
Pero, por que son más chicos?— respiraste profundamente para contener la risa. —Todos son diferentes, hay unos más grandes y otros más chicos. — le explicaste.
—Pero, yo quiero pechos grandes como los tuyos. — hizo una mueca.La situación ya se estaba poniendo incómoda así que optaste por decir
—Okay Daniela, suficiente por hoy, a dormir.— reíste y la acobijaste en tus brazos hasta que alcanzara el sueño.JSJSJSJSJSJSJSJS
YA VIERON LAS CANCIONES NUEVAS QUE TOCARON EN GDL??!??!!?
GRACIAS POR EL APOYOOO!!!!