Asta, un héroe de guerra decide buscar a alguien para engendrar a su primogénito, formar una familia, ya que como consecuencia de varios sucesos decidió alejarse de todos, incluso de quienes amaba.
Sin más, su vieja amiga y compañera de orden Noelle...
— ¿Y dime, que compraste? ¿No pensé que la realeza comprara en un lugar como este? - Asta sonaba pensativo
— Asta, eres de la realeza, tus terrenos son de la realeza, además...la realeza ahora se rige por el linaje, no por riquezas - Noelle tenía cara chibi
— Ah, es cierto - Asta rió un poco
— En fin, no se si usaré lo que compré - Noelle estaba indecisa
— Bueno, sea lo que sea, me gustará y se verá bonito en ti - Asta le dedicó una pequeña sonrisa
— Gracias - Noelle se sonrojó
— Asta-san!! Noelle-san!! - Una joven rubia se acercó
— ¿La conoces? - Asta estaba confundido
— Es Marie, Bakasta - Noelle dió un pequeño sape a Asta
— Marie-chan?! - Asta se sorprendió
— Hai, que gusto verlos! - Marie se acercó con una sonrisa
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— De verdad es Marie? - Asta habló al oído de Noelle
— ¿Claro que lo es, que pensabas? ¿Que sería una niña para siempre? - Noelle suspiró
— Jaja, en un mundo ideal - Asta dió una carcajada — En fin, hola niña, mira lo hermosa que has crecido - Asta Acarició el cabello de Marie
— Ha..Hai, muchas gracias - Marie se sonrojó
— Hummm - Noelle tenía un puchero
— Hai Hai, tu también eres hermosa, Elle - Asta dió un beso en la mejilla de Noelle
— Humph, no me comprarás con eso - Ella lucía molesta.
— Que tal si te hago un postre hoy - Asta vió las orejas de noelle moverse
— S..si lo pones así.....Que sea de fresa - Noelle lo volvió a ver con una sonrisa — ¿Y tú Marie, quieres venir hoy con nosotros? - Noelle se dirigió a Marie
— Eh? S..si, me gustaría - Marie tenía una gran sonrisa
Media hora después
— Wuaa, que linda casa - Marie estaba asombrada mientras estaba sentada en la sala de estar
— ¿Verdad? - Asta tenía una gran sonrisa
— Bueno, yo quiero cambiar algunas cosas - Noelle estaba pensativa
— Bueno, hay que armar la habitación para el bebé también - Asta también estaba pensativo
— ¡¡¿Bebé?!! - Marie se sorprendió — Noelle-san estás embarazada? - Marie tomó las manos de Noelle con emoción
— Eh? No...no es solo que ¡¡Ah!! - Noelle soltó un pequeño gemido
— Moo, eso explica por qué tus senos se han vuelto tan grandes - Marie tenía un puchero mientras apretaba y movía los senos de la peliplata
