El lobo disfrazado de cordero.—¿Y bien? Por favor no me deje en suspenso.
El abogado toma una profunda respiración.
—Tu licencia de investigador ha sido revocada, Nakamoto.
—¿Mi qué? —susurró sin creérselo. El abogado le miraba imperturbable, casi con una pizca de molestia. Estaba tan serio, mantenía una arrugada cara inexpresiva no le decía mucho. Pero sus ojos estaban que estallaban de decepción.
—Debo ser honesto, no hay mucho que pueda hacer usted para evitarlo— el anciano lo había llamado de emergencia a primera hora de la mañana con noticias que no le agradarían. Apenas llegó a esa oficina antigua y polvorienta sintió como los colores abandonaban su cara por el tipo de expresión que le hizo su abogado apenas le vio.
—¿Eh?
—Te han revocado la licencia de investigador, algo irreversible. Planean investigarlo a fondo por los crímenes que cometió. Es una situación grave, Nakamoto. Me gustaría que me explicara usted mismo la situación.
—No, no, debe haber una equivocación—Yuta le mostró su perfecta hilera de dientes como si fuera suficiente para convencer al anciano—. Todavía tengo mi licencia, de hecho, antes de que me llamara estaba de camino a la oficina.
—Nakamoto—llamó su atención—. Está acusado de fabricación de testimonios, sobornos y acusaciones falsas. Y van a investigarlo a fondo para asegurarse de que esos sean los únicos crímenes que haya cometido.
El japonés reprimió insultos hacia el anciano. Sus nudillos se volvieron blancos al apretar los puños mientras su mirada recorría la oficina en busca de un escape de esa realidad asfixiante. Aquel hombre lo estaba presionando. Ya se había dado cuenta.
—Las acusaciones falsas son esas que usted dice—suelta una risa—. Jamás he cometido un delito en mi vida, ¿cree que no conozco las leyes? No como usted, claro, pero mi trabajo requiere que actúe a favor de ellas.
—Conozco su trabajo—confirmó—. Va de la mano con nosotros los abogados, y nosotros somos los últimos en procesar todo el juego. Pero no es lo que quiero oír. Quiero que me cuente lo que sucedió, porque de ninguna otra forma podré ayudarlo.
—¿Por qué usted supo primero que me quitaron la licencia?
—Usted mismo me encargó la tarea de manejar las situaciones en el ámbito legal. Yo controlo esa parte de su vida—entrelazó los dedos. Yuta se maldijo. No se suponía que debía saber algo como eso justo en ese momento de su vida cuando los concursos internos del departamento de investigación estaban comenzando.
Él se involucraba en situaciones ilegales porque era su trabajo, pese a tener un respaldo al cumplir con sus misiones, todavía necesitaba de un excelente abogado que le ayudara a defenderse si las cosas se complicaban en los conflictos laborales. La mayoría de casos en los que participó tuvo que adoptar roles para resolverlos exitosamente.
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Internado Infernal || PRIMER LIBRO
FanficYuta se ve en el borde de un precipicio de desgracias en cierta etapa de su vida cuando creyó que nada podría empeorar e interferir con el trabajo de sus sueños. Ama ser un investigador, ama resolver casos complejos porque no tiene nada más que perd...