-Los chicos apenas se fueron cuando Rubius me jalo del brazo para sentarnos, recuerdo haber visto sus mejillas rojas de los nervios, y se veía muy tierno sonriendo de esa manera.-
-Entonces.. ¿eres Mérida Carolan Bridge Bolívar?
-¿Como lo sa..?
-Vi las listas, y me llamo la atención tu nombre.
-¿Y tu eres..?
-Ah, yo soy Rubén Doblas Gundersen, un placer.
-El placer es mio.
-¿Entonces...?
-Pues.. bienvenido a Arizona.
-Gracias.
-Sera mejor volver al aula.
-Volvimos con los chicos, recuerdo las miradas de ellos, que al final caían sobre Rubius y yo. Sabia que me miraban asi porque pensaban que me gustaba el. Y en realidad, me agrada, pero no me gusta.-Narra Rubén:
Se acabaron las clases, Marie saco su patín portátil, Norman una patineta, y la chica de mis sueños aplasto un boton de sus tenís, dejando al descubierto unas llantas de patines.
-Rub, ¿donde vives?
-A unas cuadras.
-toma, pense que nunca lo usaría, pero es para ti.-Saco un monopatín, portátil claro.-
-Muchas gracias.
-Fuimos por las calles, vivía enseguida de mi, y nunca me dí cuenta.-
-Entonces ¿vienes por mi en la tarde, digo para salir?
-Claro, ¿a las 5 te parece?
-Me encantaría, nos vemos.-En la tarde, me puse un pescador de soldado, un camisón blanco tirahuesos y unos DC. Ella me esperaba en la banca, un camisón gris manga larga, unos pantalones negros y unas botas rojas. Leía un libro, se veía concentrada. Su cabello rojizo, agarrado en una coleta, hacia que sus pecas se notaran mucho, sus ojos negros eran profundos, hasta sus finos labios carmesí, era preciosa, ¿como una persona tan bella, no tiene personas a su alrededor? Osea hasta sus manos, largas y huesudas, eran bellas. Me acerque, antes de que llegara, cerro el libro y canto un pedazo de canción:
«Tousand years, I love you for the tousand years..»La admire por un tiempo, cuando termino, Dí un aplauso, ella se estremezco y se puso roja como un tomate.-
-Mierda Rubén, me has matado del susto.
-No era mi intención.. aquí entre nos, tu voz es bella.
-Eso no es del todo cierto..