Estar Preparado -COMPLETO-

Capítulo 10: Las cosas cambian

Capítulo 10: Las cosas cambian

Albus, Minerva, Remus, Arthur, Molly, Ginny y Harry cruzaron el portal y reaparecieron en el hall de entrada de Hogwarts. Tonks, Severus, Filius y Pomona los estaban esperando; así como algunas de las armaduras.

Harry solo sonrió a los guardias que habían tomado posición para defender el castillo de cualquiera lo suficientemente tonto como para tratar de pasar por el portal. "Hogwarts, por favor asegure el portal, nadie entra ni sale."

De repente, el piso de piedra se elevó alrededor del portal, sellándolo. Las piedras se volvieron claras para que pudieras mirar hacia el portal.

"Profesores, gracias por su preocupación, ahora es tarde, ¿a alguien le importaría una copa? Albus, ¿por qué no nos dirigimos a tu oficina entonces? Comandante, despliegue 2 escuadrones para patrullar los terrenos."

Todos se sorprendieron cuando uno de los trajes de armadura saludó a Harry y vio a dos grupos de armaduras salir. Harry miró las caras sorprendidas de todos, "¿Qué? ¿Realmente pensaste que eran solo decorativos? Venga." Harry llevó al grupo a la oficina del Director, donde todos disfrutaron de una bebida nocturna.

Severus interpretó al barman y le entregó a todos vasos de whisky de fuego, incluidos Harry y Ginny. Molly estaba a punto de objetar, pero se detuvo. A diferencia de lo que le dijo a Harry y Ginny, Molly y Arthur sabían que un vínculo del alma significaba que ahora estaban casados. Le dolió un poco a Molly saber que su bebé había crecido, pero la forma en que Harry se manejó en Gringotts la hizo darse cuenta de que no hay nadie mejor para su pequeña niña.

El grupo conversó durante un tiempo sobre cosas triviales; el clima, el Quidditch, los recuerdos de los Merodeadores, las clases, etc. Cuando el grupo comenzó a cansarse, Harry se levantó del sofá en el que estaba sentado y se dirigió a Albus y Minerva.

"Albus, profesor—"

Minerva lo cortó "Señor Potter, ya que ahora son todos nuestros jefes, creo que sería apropiado si nos llamaran a todos por nuestros nombres, mientras están en privado." Minerva le dio una de sus sonrisas muy raramente vistas,

"Por supuesto Minerva, solo si me llamas Harry. De todos modos, es tarde, y voy a llevar a Ginny a la cama y llamar la atención. ¿Crees que podrías organizar una reunión completa del personal para mañana por la noche? Hay una serie de cosas que creo que el personal necesita saber. Además, me gustaría reunirme con ustedes dos de antemano."

Los ojos de Albus brillaban locamente, sabía lo que Harry tenía bajo la manga, pero aún no quería asustar demasiado a Minerva.

"Por supuesto, Harry, ¿qué tal si organizamos la reunión de personal para las 7 pm después de la cena y podemos reunirnos después del almuerzo en su oficina?"

"Gracias. Eso suena bien, buenas noches Albus, Minerva." Harry caminó hacia el sofá donde yacía un Ginny dormido. Dijo varias buenas noches en el camino. Cuando llegó a Ginny, alguien golpeó su hombro; se dio la vuelta y miró directamente a los ojos de Severus Snape.

Harry luego escuchó la voz de Severus en su cabeza. "Señor Potter, me he visto obligado a pensar en varias cosas últimamente. Solo quería decir que lamento la forma en que te he tratado y que me esforzaré por ser un mejor profesor."

Harry simplemente asintió y se volvió para recoger la forma dormida de Ginny Weasley; cuando se volvió para salir por la puerta, se dio cuenta de que Albus lo mantenía abierto para él y también tenía un libro. Harry vio el título y agradeció a sus padres por darle a Albus una copia completa de su biblioteca. Harry lo tomó y salió de la oficina y se dirigió hacia su propia oficina y cámaras de cama.