Traducciones - Tumblr Tokyo Revengers

𝗢𝗻𝗲𝘀𝗵𝗼𝘁 #3

User: @todoroki_waifu

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Pesonaje:

➹ Chifuyu Matsuno

La rutina de Chifuyu después de la escuela siempre era la misma. Se encontraba con Baji en la puerta de la escuela, caminaba a casa juntos y, ocasionalmente, pasaban tiempo en casa de Baji hasta la noche. Pero hoy fue diferente. En lugar de entrar en una sala de estar vacía, había alguien sentado en el sofá frente a la televisión, alguien a quien Chifuyu no reconoció en la casa de Baji.

"¡Oh! ¿Estás en casa temprano?", Baji lo dijo mirando a la figura sentada en el sofá. La persona se volvió para enfrentar a Baji con una expresión desinteresada.

Chifuyu se quedó congelado en el lugar. Había visto ese rostro angelical antes, pasando por su clase siempre que él estaba soñando despierto en clase, y cómo caminaba intencionadamente por la ruta más larga hacia su clase solo para poder admirar su belleza mientras miraba por la ventana de su salón de clases hacia el terreno verde. Sin lugar a dudas, eras tú, su enamoramiento, sentado en el sofá de Baji. Su corazón se hundió; por supuesto que estarías con un tipo tan duro como Baji Keisuke. Chifuyu creía que ni siquiera tenía una oportunidad, no cuando se trataba de Baji, el chico más genial que había conocido.

"No fui a la escuela hoy, idiota, estoy enferma", explicaste, con una expresión cada vez más molesta hacia el chico de cabello negro. Baji se acercó a ti y puso una mano en tu frente. Chifuyu no podía soportar ver más; no podía soportar ver a la persona por la que secretamente suspiraba siendo cuidada y amada por otro hombre. Pero justo cuando Chifuyu estaba a punto de apartar la mirada hacia el suelo, Baji te dio un golpecito en la frente en lugar de tocarla, lo que te hizo jadear de dolor.

"¿Qué demonios fue eso, idiota?", le espetaste a Baji, mientras una mano le daba un golpe en el brazo y la otra subía a calmar tu frente.

"Por llamarme idiota", dijo Baji de manera tranquila. No pasó mucho tiempo antes de que los dos comenzaran a discutir mientras Chifuyu se quedaba a una distancia de los dos, atónito. ¿Estaba... en medio de una pelea de amantes? Aunque no se sentía así, en realidad, ahora que había observado más de cerca, ambos se parecían de alguna manera...

Antes de que pudiera entenderlo, fue arrancado de sus pensamientos. "¿Podrían dejar de pelear por una vez? ¡Tenemos un invitado!".

Tú y Baji giraron la cabeza hacia la fuente de la voz.

"Perdón, mamá", dijeron los dos, mirándose de reojo y lanzándose miradas asesinas.

Fue entonces cuando una idea surgió en la mente de Chifuyu. Tú y Baji son hermanos. Suspiró aliviado, tal vez tenía una oportunidad contigo.

"Vamos, Chifuyu", la voz de Baji lo sacó de sus pensamientos mientras lo seguía apresuradamente hacia su habitación, echando un vistazo a ti en el proceso.

El ambiente en la habitación de Baji estaba en silencio entre los dos chicos, ninguno sabía qué decir después del incidente.

"No te molestes en ir tras T/n",dijo Baji de repente, tomando a Chifuyu por sorpresa, haciéndolo tartamudear y revolver sus pensamientos para encontrar una respuesta adecuada.

"Puedo decir que te gusta, Chifuyu, la has estado mirando desde que entramos en la casa". Chifuyu cerró la boca, su rostro se tornó un ligero tono de rosa.

"Es grosera, molesta y fastidiosa. Nunca sobrevivirás con ella constantemente regañándote a tu lado", suspiró Baji, pellizcando el puente de su nariz, como si estuviera reviviendo la experiencia nuevamente. El chico rubio asintió y prometió a su amigo que renunciaría a perseguir a su hermana a partir de entonces.

Pronto, llegó la noche y Chifuyu estaba a punto de dirigirse a la puerta de entrada cuando una voz suave lo detuvo desde atrás. Chifuyu se sonrojó de inmediato, reconociendo al instante quién era.

"Lamento que tuvieras que escuchar nuestras discusiones, Keisuke y yo. Aquí, toma esto como una disculpa de parte de Keisuke y mía". El chico abrumado se dio la vuelta y alcanzó el regalo, que era una bolsa llena de bocadillos y golosinas para gatos.

"¡Oh! Keisuke me ha hablado mucho de Peke J, espero que también le gusten las golosinas", dijiste tímidamente, sonriéndole a Chifuyu, quien sentía que se estaba derritiendo por lo adorable que parecías.

"¡G-gracias! ¡Estoy seguro de que también le gustarán!" el pobre chico tartamudeó, una mano libre subiendo a rascarse la cabeza.

Te reíste, asintiendo hacia él. "¡Ten un viaje seguro de regreso a casa!"

Le saludaste mientras salía de tu casa, y él te devolvió el saludo. Una vez que la puerta se cerró, Chifuyu se aferró a su camisa, su corazón latiendo rápidamente y su rostro se sentía cálido. Tal vez... podría permitirse romper esa promesa a Baji.