Dos caras de la misma moneda

Capitulo 4

"¿Amane-kun?" Nene lo tocó en el hombro. "Amane-kun~?"

Aoi miró con interés. "¿No se despierta?"

"Parece que no." Nene frunció el ceño al ver al chico roncando. De repente, Akane se acercó, crujiendo los puños. "Permíteme."

El Misterio de la Escuela ya había sido informado de la situación de su líder por Teru, y estaba encantado de hacer el papel de un compañero de clase.

Nene chilló, "E-Espera, Akane-kun!"

Amane fue despertado abruptamente por un dolor pulsante en la cabeza. Se agarró la cabeza. "¡Ay! ¡¿Qué diablos?!"

Reconoció la figura del No. 1 de pie frente a él. Amane murmuró, "Por supuesto..."

Nene quería sacudirlo. "¿P-Por qué hiciste eso, Akane-kun?"

"Aquí lo tienes, despierto." Akane se encogió de hombros. "Y no puedo perder la oportunidad de golpearlo."

Aoi frunció el ceño, sin gustarle su método. "Eso estuvo fuera de lugar, Akane-kun. No sé por qué querrías golpearlo, pero es el amigo de la infancia de Nene-chan."

Inmediatamente, Akane estaba a los pies de Nene, suplicando perdón. No podía soportar haberla disgustado y ofreció varias formas de castigo para compensar. Parecía estar más arrepentido de haberla molestado que por la acción en sí. Aoi lo miró durante unos momentos antes de ceder y acariciar su cabeza. "Ya, ya. Te perdono."

Al fondo, Amane bostezaba y se frotaba los ojos. Nene lo miró con preocupación, "¿No dormiste lo suficiente anoche?"

"¿Eh?" Amane todavía estaba un poco atontada. "Uh, no, realmente no..."

"¡Oh, no!" Ahora parecía muy preocupada. "¡Espero que Minamoto-senpai no haya intentado exorcizarte mientras dormías! ¿O Kou-kun tenía un sueño ruidoso?"

Amane se rió de ella y tomó su mano de manera reconfortante. Se sonrojó, y como él tenía demasiado sueño para darse cuenta de lo que estaba haciendo, solo sonrió, "No te preocupes, Yashiro-san. Acabo de pasar una pijamada divertida".

"Oh..."

"Me alegra que te importe tanto~" presionó sus dedos contra su mejilla, enrojeciendo aún más su rostro. "Debo gustarte mucho, ¿verdad?"

Yashiro se sonrojó como un tomate maduro. Exclamó: "¡U-um! ¡C-como amigos!"

"Claro, como amigos..." Amane se dejó caer sobre el escritorio. Nene pensó que se había vuelto a quedar dormido, pero sintió sus labios en su palma. Murmuró, casi tristemente: "Nada más..."

"A-Amane-kun..."

Sus leves ronquidos fueron la única respuesta que recibió. Nene suspiró aliviada mientras la temperatura de su rostro descendía. Le permitiría dormir el resto de la mañana, ya que no pensaba que podría lidiar con un Amane somnoliento y coqueto. Sacando suavemente la mano de su agarre, acarició tiernamente su cabello, notando la suavidad de sus negros mechones. Estaba completamente encantada con su expresión adoradamente tranquila.

"¿Qué estás haciendo~?"

Nene dio un respingo, su mano saliendo rápidamente del cabello de Amane. Hanako estaba inclinándose extremadamente cerca de su rostro, con sus ojos analizando su semblante. Ella se ruborizó y exclamó en voz baja: "¡H-Hanako-kun!"

"¡Ese soy yo!"

"No te vi entrar..."

"Bueno, eso podría ser porque estabas ocupada acariciando a mi contraparte humana."