Capitulo 2 Trucos: Una manta fluorescente no me deja dormir

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La noche estrellada cubría al campamento con su silencio y oscuridad. Todos yacían en sus camas navegando entre sueños. En el establo los pegasos con las plumas desordenadas dormían tranquilos. Los sonidos de la naturaleza callaban el silencio lo suficiente para volverse la perfecta música de fondo.

Habían pasado pocas horas desde que Nico había caído dormido. Se encontraba plácidamente a medio vestir, abrazando la almohada, las sabanas mitad cubriéndole , mitad en el suelo. Extrañamente y por primera vez en mucho tiempo, no se hallaba soñando. Solo dormía con la mente en paz.

Le parecía que habían pasado segundos o quizás minutos desde que logro pegar el ojo. No tenia el sueño pesado, pero hoyo un sonido extraño entre sueños. Se revolvió en la cama como quien espanta aun mosquito acechante pero el sonido no se detuvo. Lentamente comenzó a volver en si en contra de su voluntad. No se molesto en abrir los ojos, presto atención a lo que captaba su oído...

Se concentro y logro escuchar lo que parecía era una canción de cuna. Abrió levemente los ojos y miro a su alrededor. Todo precia normal, nada fuera de lo ordinario. Volvió a recostarse pesadamente creyendo que solo había sido su impresión, o quizás un sueño. "La primera noche que duermo sin pesadillas y lo interrumpe un simple ruido, probablemente sean los de Apolo escuchando música". Pensó frustrado refunfuñando internamente mientras intentaba volverse a dormir.

La verdad, era que no estaba equivocado, mucho menos había sido un sueño. Alguien - o algo- , en lo profundo del bosque, cantaba una melodiosa canción para dormir. Era una melodía melancólica, casi como un llanto. Parecía ser la voz de una mujer, era suave y aguda, dulce y tranquila.

Cualquiera hubiera supuesto que era una ninfa.Pero sin aviso, de las profundidades del bosque, una luz violeta deslumbro a casi todo el campamento. Los caballos no la notaron o simplemente la ignoraron, como si fuera algo normal. La mitad de los capitanes y otros campistas, se despertaron casi inmediatamente alertando conductas extrañas.

Tomaron las armas que tenían a la mano y se dirigieron hacia el lugar de donde provenía la luz. Esta brillo por unos segundos. Nico abrió los ojos como platos, salto de la cama y miro a través de su ventana, extrañado. La luz se apago luego de mili segundos de estar en contacto con su pálida piel.

Tomo su ropa y se puso la chaqueta a los hombros. A diferencia de los demás, no tomo su espada. Salio corriendo hacia la luz por que creyó saber que era, aunque no sabia como.

Al llegar, los campistas habían formado un circulo alrededor de la fuente de luz en cuestión. Preparados para atacar en caso de que se diera lugar a una batalla. Quiron daba el cierre al semicírculo, observando atento. su mirada profunda y seria intentando descifrar que era lo que se encontraba frente a ellos. No podía poner en peligro a los semidioses, pero realmente, no sabia decir si era una amenaza.

El hijo de Hades se abrió paso entre ellos sin darles oportunidad de detenerlo. Se detuvo a unos cuantos pasos de lo que parecía ser un montículo iluminado. No emitía calor, por lo que la lúz no era precisamente para iluminar- o quizas no era una lúz-. Nico acerco su mano lentamente, dudando de su propio juicio pero su instinto nunca se equivocaba, cuando hoyo a Will pidiéndole que se detuviera con voz de alerta y preocupación. Se volteo a verlo para asegurarle de que todo estaba bien con un pulgar arriba y un guiño un poco presumido.

Acerco su mano lentamente, todo el campamento se encontraba expectante, listos para saltar a batalla en caso de que fuera necesario. Casi cuando estaba apunto de traspasar los rayos de luz, se dio cuenta de que era. Estiro la mano y tiro el objeto como si fuera una sabana. Que efectivamente, así lo era.

Se formo un barullo decepcionado entre los campistas, la cabaña de Ares lucia mas decepcionada que todas las demás. Voltearon hacia Quiron buscando respuesta a lo que acababa de pasar. Debajo del manto de luz no había nada mas que una roca sobresaliendo del suelo. Que parecía haber sido dispuesta allí apropósito.

Quiron se rasco la barbilla, su rostro reflejaba casi la misma confusión que los adolescentes. Extendió la mano cuando Nico le entrego la "frasada" luminosa. La examino unos momentos, pensando que quizás era alguna broma que se fue de las mano, pero eso no explicaba los rayos deslumbrantes hace unos momentos.

Parecía una capa para escabullirse... mejor dicho, para llamar demasiado la atención.

" No sabre mas hasta que averigüe que es este objeto exactamente, y a nadie le hará ningún bien quedarse despierto hasta que eso pase. Todos regresen a sus cabañas a descansar semidioses. " Sentencio Quiron.

Volvió a mirar a Nico, preguntándose como es que el azabache sabia lo que era. Nico realmente no lo sabia.

Todos habían regresado a sus cabañas al igual que el. Solo estaban siendo obedientes, nadie lograría pegar el ojo esa noche, todo el asunto los había dejado desconcertados. A Nico especialmente.

Empezó a hundirse en sus conclusiones, buscando respuesta. Ese tipo de cosas no se saben solo por que si.



Termino enredándose en sus ideas al punto en que empezaba a dormirse cuando escucho un "tap tap" en la ventana. Se levanto a ver quien era un poco molesto para darse con Will al abrir la ventana.

"No puedo dormir " susurro Will a la oscuridad de la habitación. Nico le dio paso invitándolo a pasar.

Cerro la ventana una vez que el rubio estaba dentro.

"Si vienes a preguntar como supe lo que era, déjame decirte que no tengo la mas mini-" No pudo terminar su frase por el beso repentino que le dio su novio.

El hijo de Apolo sonrió y se separo de él sentándose en la silla del escritorio. "¿Que es esto?" Pregunto levantando el sobre negro como el abismo.

"No estoy seguro, apareció ayer cuando llegue a la cabaña. Esta en un idioma que no logro identificar" Explico el azabache mientras Will abría el sobre cuidadosamente para leer lo que llevaba escrito.

"Creo que es un embrujo" Comento Will levantando las cejas sin quitar los ojos de la carta."...al menos eso parece. Entre en la cabaña de Hecate una vez cuando Lou se enfermo, y había varias notas manuscritas con este idioma." Le entrego al carta a Nico sonriente como quien acaba de resolver una adivinanza.

"Un embrujo... ¿Quien me enviaría un embrujo?" Exclamo algo confundido y mortificado, quizás las sombras se revolvían por advertirle que no leyera la carta en voz alta, tal vez el simple hecho de abrirla desataba su poder. En cualquier caso, tenia que averiguar para que servia el embrujo, si una maleficae se la había enviado al menos debía descubrir como detenerlo.

"No se" Rezongo Will bostezando ."Pero podrías llevársela a Lou y averiguar si sabe algo".

"Eso haré "Nico casi se había olvidado de la presencia del otro, estaba demasiado sumergido en sus propios pensamientos. Eso le pasaba mucho últimamente..."Gracias en serio, buenas noches Will"

"Buenas noches calaverita". Le dedico un guiño y se retiro deslizándose por la ventana.

Nico se quedo unos minutos analizando la carta, la tinta, el sobre... su aura . A pesar de que podría ser un embrujo de magia negra, y se veía como tal- si se mueve como ganso y grazna como ganso, debe serlo.-  No sentía peligro cuando  la sostenía, quizás era un asunto completamente diferente si uno la leía . Las sombras revolviéndose significaban la presencia de algo... al salir el sol averiguaría si era algo malo o no ...


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"...Se atribuía generalmente la magia maléfica a hechiceras (en latín maleficae), de las que hay numerosas menciones en numerosos autores clásicos."

Tome esta cita de un articulo para explicar que eran las "maleficae" en caso de que alguien no no haya deducido por el contexto.

gracias por leer y disculpen la demora :3

- Lola (Vampy)

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