GANAS

334 18 2
                                    

No le contesté nada. Parte de mi tenía miedo pero también ganas de besarlo, eso no lo voy a negar.

L- Vamos a bailar, quieren?

Creo que ni nos dejó contestar porque nos sacó a todos de los pelos casi.

Los chicos se quedaron apoyados en la barra mirándonos, nosotras bailando, bah o un intento de eso porque somos durisimas las tres.

Me había tomado dos cervezas más y ya estaba desacatada. Con Enzo no parábamos de mirarnos pero hubo un momento en donde lo perdí de vista.

L- Vamos al baño?

C- hay mucha fila

A- yo te acompaño, también quiero ir al baño

C- las espero acá.

Las vi marcharse y casi me voy a la barra cuando siento a alguien detrás mío que me abraza por la cintura y me da un beso en el cuello. Lo reconocí al instante por su perfume.

- Te había perdido de vista

- Yo no, hermosa.

Me apoya sobre él y no dudo en bailarle, bajaron las luces así que nadie nos veía prácticamente. Sabía lo que estaba provocando en él, sentía como su respiración se aceleraba y no hace falta decirles como estaba cada vez que le apoyaba mi cuerpo. Me da vuelta y me mira tan de cerca que nuestros labios se chocan.

- Tenes idea de lo que estas haciendo?

- Algo

- Tenes que terminar lo que empezas, sabías?

Solo me río, él comienza a dejarme besos cortos en el cuello. Me separa de él cuando suben las luces, me toma de la mano y comenzamos a caminar. Vimos un pasillo largo, oscuro dentro del bar. Me lleva ahí y me apoya en un rincón.

Me agarra del pelo, me sube mientras yo enredo mis piernas en su cintura. Primero me da besos cortos en el cuello y después comienza a jugar con su lengua. Yo? Estaba loca, mi cerebro me quería controlar pero realmente mi cuerpo estaba descontrolado. Lo único que quería en ese momento era más y más de él. No me importó que sea en un lugar público, aunque soy bastante tímida.

Deja de jugar con mi cuello y sube a mis labios. Por fin, me besa. El beso fue lento al principio pero cada vez más se tornaba desesperado. Nuestros labios conectaban a la perfección.

En un momento deja de besarme y me baja, pensé que había terminado pero no. Siento su mano bajando por mi abdomen hasta llegar al botón de mi jean.

- Puedo?

Solo asiento, sabía lo que iba a hacer. Sinceramente lo necesitaba, hace tiempo que nada por ahí abajo. Antes de hacerlo me da un beso en los labios y mete su mano.

Suspiró cuando notó lo mojada que estaba y comenzó a mover sus dedos. Me tuve que agarrar de sus brazos porque mis piernas no me funcionaban prácticamente y necesitaba apoyarme en algo.

Frenó cuando sintió su celular sonar, era Facundo. Maldito Colidio le iba a arrancar esos mechones rubios que tiene.

- los chicos y tus amigas se quieren ir, yo no traje mi auto así que dependo de facu.

- si vamos.

------------------------------------------------------------

Maratón 2/3

Nosotros || Enzo Díaz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora