Capítulo 1

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Edenia... Siglos atrás...
El reino tenía un día más de prosperidad, paz, armonía, en el que además, celebraban el aniversario del reinado de Jerrod y Sindel, con platillos, bombos y trompetas.
En un carruaje se encontraban el rey y la reina, junto a la princesa Kitana, y su amiga Jade, quienes observaban todo su alrededor, encantadas por el carnaval hechos para la familia real.
Y entre la multitud que observaba, había un niño acompañado de su madre, el niño estaba fascinado por la fiesta, y logra saludar a la reina Sindel, que desde la distancia le saluda también.
Los reyes estaban cautivados por la celebración:

-Jerrod: Me sorprende que la gente haya hecho ésto por nuestro mandato.

-Sindel: Demuestra que son gente amable y que son capaces de recibirnos con ovaciones.

-Jerrod: Después de todo, logramos que Edenia sea un reino próspero donde los delitos son poco frecuentes.

-Sindel: Además... Kitana está feliz...

Todo era alegría, pero de repente, el que conducía el carruaje es asesinado, su cuello es quebrado, y cabeza arrancada, pero lo verdaderamente aterrador, es que no había nadie atrás, al menos eso se supone:

-Kitana: Ahh!

-Sindel: Tranquila Kitana!

La gente se descontrola, en pánico, no sabían lo que había pasado, y Jerrod se baja para ver al cadáver:

-Jerrod: Qué es es---

De pronto, Jerrod cae al piso, pero no se había tropezado, algo lo había atacado, ese algo muestra su forma real, la de un reptiloide, que forcejea con el rey, y trata de morderlo:

-Jerrod: *Forcejeando* Todo el mundo escóndanse!

Sindel, Kitana y Jade bajan del carruaje:

-Sindel: Detrás de mí.

Jerrod le da un rodillazo en el estómago al reptiloide, seguido de una patada en la cara que lo hace caer al piso:

-Sindel: Qué es lo que ocurre Jerrod!?

-Jerrod: No lo sé... Tal vez... Oh no...

A la entrada del reino, una horda de Tarkatanos corre y empieza a matar a cuanto edeniano se cruce:

-Jerrod: Es él...

Detrás de los Tarkatanos varios seres aparecen, una con características de insecto que con unas patas como de araña que salen de su espalda atraviesa a edenianos sin piedad, y otro de 4 brazos que desmembra a cuánto edeniano vea correr:

-Jerrod: Sindel, lleva a las chicas al templo, escóndete con ellas, las veré dentro de unos minutos.

Sindel se lleva a Kitana y Jade.
Entre la gente que corría, el niño y su madre antes mencionado corren entre la multitud, pero en el proceso se pierden, el niño no encuentra a su madre, y en cambio ella buscaba de igual forma a su hijo.
Jerrod, por su lado, ve a todos los edenianos que caen muertos uno a uno, hasta que frente a él, se levanta el reptiloide, y detrás de la criatura, una especie de carruaje que era llevado por una criatura de casi 3 metros, que en su espalda yacía una mujer que miraba su alrededor con alegría:

-Jerrod: Ustedes... Qué hacen en Edenia!?

Del carruaje, se baja un sujeto de aproximadamente 2 metros con 50, sostenía un martillo gigantesco de metal, y su corpulencia era abominable e intimidante:

-Jerrod: Qué hace el emperador del Mundo Exterior aquí!? Explícate Shao Kahn!

-Shao Kahn: Hola... Jerrod... Te alegra nuestra visita?

Mortal Kombat Legends: La furia de un dios.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora