Celar

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El tic-tac del reloj en la pared resonaba en los oídos de Jaekyung, aumentando su ansiedad. Cada segundo que pasaba sin noticias de Dan parecía una eternidad. ¿Dónde estaría Dan?
¿Con quién estaría? ¿Por qué no le respondía los mensajes?

Finalmente, el sonido de la puerta principal lo sobresaltó. Jaekyung se levantó rápidamente del sofá y se dirigió hacia la entrada. La angustia se reflejaba en su rostro mientras abría la puerta y se encontraba con Dan parado frente a él

—¿Jaekyung? ¿Pasó algo?— pregunto Dan, desconcertado por la tensión en el ambiente

Jaekyung se "esforzó" por mantener la calma pero sin poder controlar sus emociones comenzó a interrogar a Dan, delatando sus celos

—¿Dónde has estado? ¿Con quién estabas? ¿Por qué no respondes mis mensajes?—dijo Jaekyung, su voz temblando de ira y su cuerpo moviéndose cada vez más cerca del castaño

Dan se apresuró a explicar, buscando las palabras adecuadas para calmar a
su pareja.

—Jaekyung, lo siento si te preocupé.
Salí a tomar un café con Heesung, mi celular se quedó sin batería así que no pude avisarte, te prometo que no hay nada más que eso.—

—¡No te creo! Siempre estás con Heesung, a pesar de que te dije que le dejarás de hablar, no lo hiciste, y sé que hay algo más entre ustedes. Me estás engañando, ¡lo sé!— gritó Jaekyung, la rabia desbordándose en sus palabras.

—te amo y solo quiero que confíes en mí. Heesung es solo un amigo, no hay nada más entre nosotros— puso una de sus manos en las mejillas de jaekyung pero este lo apartó de un manotazo

—¿Que hay en esa bolsa— pregunto señalando lo que Dan tenía en una de sus manos

— un perfume— respondió

—¿El te lo dio verdad— su ira iba aumentando cada vez más

—Sí, Heesung me lo dio— admitió Dan, su voz apenas un susurro.

La confesión golpeó a Jaekyung como un puñetazo en el estómago. Se quedó mirando a Dan, incapaz de creer lo que acababa de escuchar.

—¿Por qué?— preguntó Jaekyung, su voz temblorosa.

—Es un regalo de cumpleaños atrasado.
Heesung lo compró cuando fuimos a comprar café. No hay nada más en eso, Jaekyung—
explicó Dan, su mirada suplicante buscando la comprensión de Jaekyung.

—necesito tiempo para pensar— dijo finamente, antes de darse la vuelta y alejarse.

En los Siguientes días, la tensión entre ellos era evidente. Aunque Dan intentó hablar con Jaekyung varias veces, este se mostró evasivo. Pero a pesar de todo, Dan no se rindió. Así que, con determinación en su corazón, Dan comenzó a planear una forma de hacer las paces con Jaekyung.

Dan decidió organizar una noche especial para Jaekyung. Pasó días planeando cada detalle, desde la cena hasta la música, con la esperanza de demostrarle a Jaekyung cuánto lo amaba.

Finalmente, llegó el día. Dan preparó la cena favorita de Jaekyung y decoró su apartamento con velas y flores. Cuando Jaekyung llegó a casa, quedó sorprendido al ver todo lo que Dan había preparado.

—¿Qué es todo esto, Dan?—  preguntó
Jaekyung, mirando a su alrededor.

Dan tomó la mano de Jaekyung y lo llevó al comedor.

—Quería hacer algo especial para ti— dijo
Dan, su voz suave —Quiero que sepas cuánto te amo y que lamento mucho lo que pasó.—

La cena fue tranquila pero agradable.
Hablaron de cosas triviales, Después de la cena, Dan llevó a Jaekyung al balcón, donde había preparado un pequeño espacio con mantas y almohadas.

—Jaekyung—dijo Dan, tomando las manos del más alto, —lamento mucho haber hecho que te sintieras de esa manera. No fue mi intención. Heesung es solo un amigo y nada más. Te amo a ti y solo a ti.—

Jaekyung miró a Dan, sus ojos llenos de emociones. Después de un momento, asintió lentamente.

—Yo también te amo, Dan—dijo finalmente

Dan asintió, apretando las manos de
Jaekyung.

—Dan —dijo Jaekyung, tomando un respiro profundo—, necesito que hagas algo por mí.

Dan asintió, mirándolo con atención.

—No quiero que hables con Heesung más. No me siento cómodo con tu relación con él —confesó Jaekyung

—Jaekyung, Heesung es mi amigo. No hay nada más que eso —dijo Dan, intentando mantener la calma.

—Lo sé, pero no puedo evitar sentirme así. Cada vez que estás con él, no puedo evitar pensar en lo peor. No quiero sentirme así, Dan. ¿Acaso quieres que me sienta así en nuestra relación? —explicó Jaekyung, intentando manipular a Dan

Dan se quedó en silencio, reflexionando sobre las palabras de Jaekyung. Sabía que era una petición difícil pero tenía que hacerlo

—Está bien, Jaekyung. Si eso te hace sentir mejor, lo haré. Pero quiero que sepas que no tienes nada de qué preocuparte. Te amo y solo a ti —dijo Dan, su voz llena de sinceridad, abrazo a jaekyung con todas sus fuerzas para seguir demostrándole su cariño

Mientas tanto jaekyung estaba orgulloso de si mismo por poder hacer que Dan hiciera lo que él quería, Dan siempre terminaba obedeciendo como perro y eso a él le encantaba

Y es algo que nunca cambiaría

Por que él siempre

Siempre

Tiene el control

























N/A: Holaa, gracias por leer, hace mucho no continuaba esta historia pero hoy tuve inspiración así que aquí estamos. No suelo releer después de que ya está escrito así que disculpen por los errores que puedan encontrar.

Violentometro Donde viven las historias. Descúbrelo ahora