Jungkook es considerado el "nerd" de la universidad debido a su constante dedicación a los libros y sus excelentes calificaciones.
En contraste, Jimin es el popular del campus, con todos a sus pies desde siempre.
Sin embargo, ninguno esperaba que su...
Jimin solto un suspiro, estaba cansado, se había pasado la mañana haciendo ejercicio, ahora había salido del baño, luego de darse una ducha.
Se acostó sobre su cama y miro el techo blanco de su habitación.
Tenía ganas de ver a su pequeño tomatico. Ese había sido el nuevo apodo que le había puesto a Jungkook, hace unos pocos días.
Estaba feliz, ese chico era una persona tan maravillosa y lo hacía tan feliz, que no quería despegarse de el ni por un minuto.
Lástima que eso no podia ser como el quería y si tenía que hacerlo. Hoy lo llevaría a su cita número ocho.
Pronto le pediría ser su novio, aunque ya se estaba cansado de su plan "maestro" y estaba seguro que en cualquier momento le haría la gran propuesta a él menor.
Aunque luego se arrepentiría de no hacer las cosas como las quiso hacer desde un principio. Pero eso daba igual, el solo quería estar con ese pequeño tomatico.
Se paró de la cama y se puso a buscar algo que ponerse. Aquello fue por más de una hora para ser precisos, no sabía que ponerse.
Quería verse guapo para Jungkok.
Lo que el no sabía es que el menor lo hayaria hermoso, como sea, hasta con un pedazo de tela, viejo y sucio.
***
Terminó de agregarse y se miro al espejo.
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Sonrió ante el resultado.
Tomo todas sus cosas, para salir rumbo a la casa de su futuro esposo.
Al bajar las escaleras, su padre le chiflo, haciendo que se sobfesalte. No esperaba ver su padre en casa, se acerco a él, feliz y lo abrazo.
─ Hola papá ─ Sonriente.
─ Hola hijo... Como que muy arreglado ¿Quien es el afortunado? ─ dijo sabiendo la respuesta.
─ Jungkook ─ dijo obvio con una sonrisa.
─ Me pregunto, cuando seré yo el afortunado de conocer a mi yerno ─ dijo divertido, viendo a su esposa llevar de la cocina, con su pequeña hija.
─ Aún no es tu yerno ─ sonrojado ─ Y pronto lo conocerás...
─ Eso esperó ─ sonríe ─ Espero que se diviertan mucho
─ Gracias papá, nos vemos en la noche ─ lo abraza nuevamente ─ Me alegra tenerte en casa
─ Lo sé ─ ríe.
─ Mami, princesa hasta la noche ─ besa las mejillas de las dos.
─ Adiós hijo, cuida bien a Jungkook-ie
─ Adiós Mimi
Jimin sonrió, asintiendo y salió de su casa, en busca de un taxi, para ir a buscar a él menor.
