4.

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Las siguientes dos semanas fueron las más largas de mi vida, estaba cansada realmente. Los profesores de Londres acostumbraban a dejar demasiada Tarea, tal caso que en Canadá a veces solo teníamos que leer y responder. El rostro de Teo detrás de mi pantalla me hizo sonreír levemente, estaba igual desde la última vez que lo vi. Lo bueno de estar en el siglo veintiuno es que podemos hace Skype cuantas veces queramos o podamos. Tras estas largas horas ambos nos hemos puesto al tanto de todo lo que ha sucedido en nuestras vidas. De Harry no hable por que no valía la pena hablar de idiotas.

-Conocí a una chica, Se llama Eva. -Comento- Es genial, en verdad.

Inhale profundamente ante la presión en mi pecho.

-No dudo que lo sea. Si te gusta ve por ella, Teo.

-No me gusta, Solo me parece genial.

-¿Entonces por qué me lo dirías?

-¿Entonces por qué te haces llamar mi mejor amiga?

Touché.

-¿Por qué no te gusta? Sugiero que te des alguna oportunidad con alguna chica. Después de todo el mundo está repleto de ellas, solo falta encontrar la correcta y lo sabes.

Pude verlo suspirar y bajar la mirada. Me incline hacia la pantalla y saque una de mis mejores sonrisas.

-Se feliz, Teo. Que nada ni nadie te lo impida ¿Vale?

Asintió y me regalo una de esas sonrisas que derriten a cualquier chica, pero estaba muy segura que solo veía a Teo como un amigo, las presiones en mi pecho de derivaban al recuerdo de nuestro beso, nada más. Después de todo uno nunca olvida algo importante. Y estoy segura de que él tampoco lo ha olvidado.

Chasqueo. -Car, tengo que irme. Tengo que acompañar a Clara a la biblioteca.

-No te preocupes, anda y cuídate.

Ambos nos sonreímos y apagamos la cámara, Solté un gran suspiro y talle mi rostro con mis manos. ¿Por qué tuve que mudarme, Joder?

Me pare de la cama de mala gana y mire a mí alrededor. ¿Llegare acostumbrarme a Londres? Realmente no lo sabía. Pero no me mataría intentarlo. Mire la hora y eran más de las seis con treinta, había acabado mi tarea y había hecho mis deberes en la casa. Tome mi celular y decidí guiarme a mis contactos, topándome con la sonrisa irlandesa de Niall en uno de ellos. Nos llevamos espectacular, es un gran chico. Un chico dulce y caballeroso, nada comparado con Harry Styles.

Se me revolvió el estómago al recordarlo, aquellos potentes ojos intimidándome sin consideración, aquel tacto que provoco que mis sentidos se enloquecieran. Es extraño el sentimiento que me provoca cuando lo veo, tan desconocido que me da miedo.

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⏰ Última actualización: Jun 18, 2015 ⏰

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