Temptation (Toji Fushiguro) +21

05

Pesadillas

Ocho años antes.

- Donde esta ese bastardo - gritó el hombre de pelo oscuro canoso. - Traigan a ese inútil.

Akito líder del clan Zenin, odiaba a su hijo menor. Toji no había hecho nada, su desgracia fue nacer con una restricción celestial privandolo de energía maldita.

Akito era un hombre mayor, de muy mal temperamento. Era cruel y autoritario. Por puro antojo adquirió una segunda esposa, Kiyoko la madre de Toji. Una mujer joven y bella. La más bella del clan en ese entonces. El único defecto que tenía a ojos del clan era su difícil carácter pues era muy rebelde. Nadie pudo oponerse al compromiso ni siquiera ella.

Akito deseó siempre a esa mujer y lo que más quería era hacerla suya y dominarla pero jamás pudo, apesar de tantos golpes y maltratos. Kiyoko nunca se dejo. Pero Akito lo dejaba pasar debido a la belleza que la mujer poseía. Al final era el unico hombre que podía estar con ella y disfrutar de ella.

Pero al dar a luz a su segundo hijo y comprobar que no tenía ni un ápice de energía maldita Akito lo tomó como un insulto, como una traición. Incluso llegó a pensar que aquel niño no era suyo.

Los maltratos hacia Kiyoko fueron más agresivos, brutales y continuos, Akito perdió la cabeza hasta el punto de mandar a asesinar a aquella mujer frente a los ojos de su propio hijo.

Toji no recibió un trato mejor hasta el día de su muerte Akito se dedicaba torturar y golpear al pequeño. Toji le tenía tanto miedo que solía esconderse por todo el clan para evitarlo.

- Señor las sirvientas lo han visto con su nieta en el jardín de la casa de Nanami. - dijo la sirvienta sin siquiera mirarlo a la cara. Antes de sobresaltarse ante otro cristal roto.

El hombre salió furioso encaminándose hacia el jardín de aquella casa.

Allí estaban los niños sentados en el jardín con un pequeño gato blanco junto a ellos, ambos se veían felices. Reían y jugaban ajenos a lo que se les avecinaba. Cosa que molestaba aún más al mayor que se aproximaba a ellos a paso firme. Cuando ya estaba lo suficientemente cerca dejó su enfado salir.

- ¡ Maldito bastardo ! - aquel grito hizo girar la cabeza de los menores.

Toji ya tenía la expresión de terror que siempre ponía al estar con su padre. Rin a su lado se escondió detrás de él con miedo. Ella sabía que su abuelo tenía ese carácter y más con Toji.

- Padre yo... - al ojiverde no le dio tiempo a hablar su padre ya le había propinado un primer golpe.

A Toji le dolió pero lo que más le dolió fue alzar la mirada desde el suelo y ver la expresión de dolor y miedo de la menor que estaba detrás de él.

- Inútil eres un jodido inútil - le dió una patada al menor que ya estaba en el suelo. Toji intentaba cubriese como podía de los golpes de su progenitor.

Akito odiaba a Toji, lo odiaba tanto que deseaba matarlo. Para el era su fracaso personalizado y lo que más odiaba de él no era el hecho de no poseer energía maldita si no el parecido que guardaba con su madre.

Toji miró por un pequeño hueco entre sus manos a la niña. Rin miraba la escena paralizada con una sombra de terror en su rostro. Toji se sentía patético al dejar que ella viese eso, como era apaleado y humillado por su propio padre sin poder hacer nada. Se sentía tan mal que cada segundo el odio hacia su padre aumentaba aún más si era posible. Ambos se detestaban mutuamente.