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Tzuyu

Maldita sea, ese beso qué me dio Chaeyoung no podía sacarmelo de la cabeza, si alguien no me lo tendría que haber recordado estaría todo bien, pero no, alguien se tenía que dar cuenta y esa persona era Minari, una de las estudiantes que puede manipular a cualquiera con su mirada angelical, pero conmigo no va a ser asi, no puedo perder mi puto trabajo por esa mocosa insolente, por eso debía hablar con Chaeyoung, ¿como conseguí su número?, fácil, le pedí a Bangchan si es que lo tenía a lo cual me dijo que si, lo anotó en un papel y me lo dio le agradecí tanto por eso y el solo me sonrió como siempre achinando sus ojos, cuando salí del salón rápidamente me dirigi a la salida pero no esperaba encontrarme a Felix con Chaeyoung avance unos cuantos pasos viendo sus rostros, yo solo los mire un poco confundida ya que iban tomados del brazo pero no creo que fuera algo malo realmente o si fueran pareja, no lo se, no me importaba en lo absoluto, creo, pero en fin fue cuando me fui a mi casa en mi auto para llegar más rápido y así fue, espere como una hora y le marque a Chaeyoung decidida a que nos juntáramos al día siguiente a las 3 de la tarde en punto, a lo que ella me dijo que si que no había problema parecía escucharse bastante emocionada yo solo le dije un "descansa" ya que duermo bastante temprano pero solo y cuando no tengo nada que hacer, bueno me fui a dormir obviamente comi antes asi que no tendría problema con eso, me fui a cepillar los dientes me puse un short con una camisa un poco larga y me fui directo a dormirme, yo realmente siento que dormir es lo mejor que existe en este mundo, tan plácidamente sin que nadie moleste, bueno eso va a depender en si pero cai tan profundamente dormida en mi cama qué no me importo si alguien tocará el timbre de mi casa, cuando desperte eran como las 10 de la noche y desperté, tenía sed así que fui abajo a la cocina a buscar un vaso de agua para saciar mi sed el agua me encanta me gusta todo lo que sea saludable, ya que me gusta cuidarme y hacer ejercicio, pero en fin recibí una llamada me pareció un poco extraño pero igual conteste.

–¿hola?– Hable como siempre.

–o-oh!, ¡hola maest- digo Tzuyu!, s-su voz se escucha un poco grave, ¿se enfermo o fue algo más peor?–

–oh, hola Chaeyoung buenas noches, y no, no me enferme es que vengo recién despertando de una siesta, es que soy de dormirme temprano pero esta vez me desperté y fui a buscar un vaso con agua ya que tenia sed jeje–

–e-entiendo–

–bueno, y dime Chaeyoung, ¿por que me llamas tan tarde he?–

Escuche a través de el celular como un leve jadeo como de nervios o algo así o quizás fui yo no más que pensé aquello.

–e-es que, quería preguntarle si, b-bueno..usted quería pasar a tomar un té o algo conmigo si no le incomoda, si es así lo entenderé perfectamente–

–¡¿q-qué?!, d-digo, perdón pero es que me encanta el té y bueno, el tecito es tecito así que obvio que acepto si quieres yo pago todo no hay problema Chaeyoung, pero básicamente es una salida de amigas no una cita jaja–

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Chaeyoung

mierda, como si me hubieran clavado una estaca en el corazón, me dolió tanto eso pero no podía no disimularlo si no se daría cuenta, quería llorar tanto en el momento de sus palabras me dejaron suspirando del dolor que sentia en ese momento, mis ojos estaban cristalizados como fue que me llegue a enamorar de esta maestra tan imprudente de tan solo 24 años que es una mujer la cual es hermosa, es perfecta tiene todo lo que un hombre podría querer.

–s-si!, bueno nos juntamos haya mañana yo la voy a buscar, ¿en la plaza?–

–claro Chaeyoung, solo se disimulada porfavor yo también trataré de ser lo más disimulada posible para que nadie se de cuenta–

Un amor no debido Donde viven las historias. Descúbrelo ahora