Relato de Silvia Salinas: La Muñeca

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El siguiente relato es narrado por una ama de casa proveniente de la ciudad de Houston, Texas.

Desde que era niña, siempre he sentido cierta fascinación por las muñecas. Pero esta historia que te contaré es muy diferente. La muñeca de la que te hablaré es la peor pesadilla que he tenido que vivir.

Todo comenzó cuando mi hermana y yo decidimos visitar una venta de garaje en búsqueda de tesoros escondidos. Recorrimos los diferentes puestos, encontrando objetos intrigantes y con una historia que contar. Fue entonces cuando vimos a la muñeca. Estaba sentada en una esquina, en medio de la oscura habitación. Su aspecto era macabro, sus ojitos de cristal parecían brillar con malicia.

Mi hermana siempre ha sido amante de las muñecas antiguas, y esta no era la excepción. No pudo resistirse a comprarla a pesar de los escalofríos que me recorrían la espalda. La dueña de la venta nos advirtió sobre la extraña conducta de la muñeca, asegurando que se movía por sí sola durante la noche. Sin embargo, pensé que cada persona exageraba un poco en este tipo de situaciones, así que decidí no tomarlo muy en serio.

Llevamos la muñeca a casa y la colocamos en el estante de mi hermana. Por las noches, cuando todo estaba en silencio, podía jurar que escuchaba susurros provenientes de la habitación de mi hermana. Pero cuando iba a comprobarlo, todo estaba en calma. Desde esa noche, mi hermana comenzó a tener pesadillas. Decía que la muñeca la seguía con la mirada y que se movía por su habitación mientras ella intentaba dormir. Yo intentaba calmarla, atribuyendo sus miedos a su imaginación.

Pero entonces, todo cambió.

Una noche, mientras me encontraba en mi habitación leyendo un libro, escuché un inquietante sonido proveniente de la habitación de mi hermana. Corrí hacia allí, con el corazón palpitando. La puerta estaba entreabierta, y al abrirla por completo, presencié una imagen terrorífica. La muñeca, aquella que parecía inerte durante el día, ahora estaba de pie junto a la cama de mi hermana, mirándola fijamente.

Paralizado por el miedo, observé cómo la muñeca se movía lentamente hacia el borde de la cama, como si estuviera contemplando su siguiente movimiento. Sus ojos, vacíos y sin vida, parecían brillar con una intensidad sobrenatural.

Mi hermana, profundamente dormida, parecía ajena a la presencia siniestra que la acechaba. Intenté reaccionar, pero una fuerza inexplicable parecía mantenerme inmovilizado en el umbral de la puerta. Mis piernas temblaban y mi corazón latía desbocado.

La muñeca extendió su pequeño brazo de porcelana hacia el rostro de mi hermana y, con una suave caricia, trazó una línea fría a lo largo de su mejilla. No pude evitar soltar un grito ahogado, pero mi voz se perdió en el silencio de la noche. Mis ojos fijos en la terrorífica escena, observé cómo la sonrisa pintada en el rostro de la muñeca se ensanchaba, revelando lo que parecían dientes humanos.

En ese momento, finalmente logré escapar del control paralizante que me había mantenido inmóvil y me lancé hacia adelante. Agarré la muñeca, sintiendo su fría piel de porcelana bajo mis manos, y la arrojé con todas mis fuerzas al suelo. El sonido de su cabeza golpeando contra el suelo llenó la habitación y, en ese instante, el aire se llenó de un alarido inhumano y agónico.

La muñeca yacía destrozada, pero no dejaba de moverse. Sus extremidades rotas se retorcían en ángulos imposibles mientras continuaba emitiendo aquel grito espeluznante. Fue entonces cuando decidí que había tenido suficiente.

Rápidamente, tomé los restos de la muñeca y los metí en una bolsa de basura. Me aseguré de que no quedara ni un solo rastro de ella antes de llevarla a la basura. Desde ese día, mi hermana no ha vuelto a tener pesadillas, y dejamos atrás aquel terrorífico encuentro con la muñeca maldita.

Sin embargo, cada vez que paso frente a una tienda de segunda mano y veo muñecas antiguas en los estantes, siento un escalofrío recorrer mi columna. Nunca más volveré a subestimar el poder del objeto inanimado, pues aquel encuentro me enseñó que no debía comprar cosas sin saber su procedencia.

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⏰ Última actualización: Nov 07, 2023 ⏰

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Terror Testimonial: "Relatos Que Desafían La Razón" Donde viven las historias. Descúbrelo ahora