𝐈𝐭'𝐬 𝐲𝐨𝐮𔓘| 𝑮𝒐𝑭𝒖𝒔𝒉𝒊

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˚. ☢ ❝ 𝐈𝐭'𝐬 𝐲𝐨𝐮┆˚❦

Un día miércoles, después de haber acosado al Omega durante casi dos días, Gojō tiene familiarizados los horarios y rutinas de Megumi dentro de la universidad.

Con astucia, Gojō solicita cambiarse al aula de Megumi en secreto; simplemente entrega algunos yenes al director, quien es una figura influyente y está dispuesto a hacer lo que sea por un poco de dinero o reconocimiento. Al ingresar al nuevo salón, Gojō observa a Megumi en conversación con un compañero y se sienta en un pupitre detrás de él.

-Hola -saludó, tocándole el hombro para captar su atención.

-¿Qué deseas? ¿Qué haces en este salón? -lo miró sorprendido, arqueando las cejas.

-El director me cambió -respondió nervioso, esbozando una sonrisa cálida.

-¿Seguro? Bueno, la verdad es que me da igual -dijo, girando la mirada hacia el pizarrón. No confiaba en las coincidencias con el albino.

-¿Cómo te encuentras?- consultó, buscando entablar una conversación.

-Bien, y si estuviera mal, no estaría aquí- respondió mientras lo miraba con una expresión poco amistosa.

-¡Tienes razón! ¿Qué tonto soy?- se rascó la cabeza de manera nerviosa al notar que Megumi comenzaba a usar su celular en un intento de ignorarlo.

-¿Y tu amigo?- preguntó al darse cuenta de que no lo había visto por ningún lado.

-¿Kamo? No vendrá a clases. ¿Por qué?- respondió con curiosidad.

-¡Para nada! -respondió mientras jugueteaba con sus dedos.

-¿Y tu novio? ¿Por qué no los veo abrazándose y dándose besos? ¿No le molestó que te hayan cambiado de salón? -le indagó tras días de estar siendo acosado con preguntas.

-¿Qué novio? -lo miró confundido.

-Suguru Getō, ¿acaso ahora no lo conoces? -puso los ojos en blanco.

-¡Él no es mi novio! -exclamó rápidamente.

-¡Ja, ja, ja! -se rió.
-¿Aún lo niegas? Pobrecito de él.

-Es cierto. ¿Y tú, Megumi, tienes pareja? -preguntó con cierta intriga, consciente de que no era la pregunta más adecuada, pero sentía la necesidad de hacerla, ya que el Omega le estaba respondiendo.

-No sabría cómo explicártelo... Digamos que no, por ahora -respondió con cierta duda, manteniendo la mirada en su celular.

-Oh... qué bueno -sonrió con tristeza.

Es consciente de que Megumi es una persona hermosa, el Omega más atractivo que jamás haya visto, y está seguro de que ha sido cortejado por varios Alfas. También entiende que, durante esos años de separación, es probable que haya estado con alguno de ellos.

Este pensamiento le duele en el corazón; si tan solo él lo hubiera tratado mejor, tal vez no habría buscado consuelo en otros. Si aún lo amara y pudiera borrar todo lo malo que le hizo, podría intentar reparar las cosas. Sin embargo, es consciente de que eso sería un acto egoísta.

Las horas transcurren y Gojō pronuncia cualquier disparate en busca de un momento de atención de Megumi, quien lo observa con una mirada fría y distante.

Al día siguiente, con Kamo presente en la universidad, la situación es completamente diferente. Megumi le sonríe y lo abraza con afecto. Al seguirlo hasta la biblioteca, observa cómo dos chicas se acercan al joven de cabello negro para invitarlo a una fiesta que se llevará a cabo esa misma noche.