Sed de Venganza | Christopher Morgan [PAUSADA]

Capítulo 5

Vikoria

Cruzó el lobby de la Fábrica de la hermandad y voy directo al elevador ignorando las miradas de los que tengo alrededor.

Llegue hace minutos a el territorio de la Bratva, después de varios días sin aparecer por aquí; Aleska me informó donde se encontraba mi hermano.

Por medio de Aleska también me enteré que Emma no se encuentra en el país, según estaba callendo en una depresión; se estaba dejando morir.

Inútil.

El elevador se detiene y camino decidida hasta la sala de juntas donde están todos incluyendo a su séquito de idiotas, antes de cruzar las grandes puertas tanteo el arma que tengo en la cinturrilla del pantalón, cuando me aseguro de tenerla los Boyevikis me abren las puertas.

En la sala están todos reunidos alrededor de una gran mesa de granito gris, tienen varios mapas y documentos que se pasan unos a otros.

Están ideando algún ataque o alguna arma.

Al sentir mi presencia todos voltean a excepción de Ilenko que solo sigue observando la laptop que tiene enfrente

El coronel al verme aprieta la mandibula y eso me hace sonreír, el hacker me observa con una sonrisa mientras que Boris me sonrie coqueto ganadose un codazo de mi primo, Uriel.

Doy dos paso con la atenta mirada de todos encima, el coronel me observa fijamente mientras que Ilenko observa su laptop sin importarle que estoy cerca de él.

Sonrió -  No sabía que los jodidos empleados se sentaban en la mesa de los jefes. - miro fijamente al coronel

Christopher estrella sus manos contra la mesa y se levanta, lo veo venir contra mi pero antes de que pueda acercarse el Hacker lo toma del brazo.

Ilenko sigue ignorandome haciendome enojar, ¿Me hizo venir para ignorarme? Bien, eso ya lo veremos.

Me voy contra Christopher pero una voz me hace detener en seco.

- ¿Que clase de señorita dice esas palabras? - mumuran a mi espalda

Me detengo sin saber cómo reaccionar tenía años son oir esa voz, mi corazón late sin parar y mi vista va hacia mi hermano que por primera vez se digna a observarme, me da una sonrisa de burla mientras que los demás se observan entre ellos.

Maldito.

Todos se quedan en silencio pasando su mirada de mi hasta la persona que tengo a mis espaldas

-¿No piensas saludar a tu padre, muchachita malagradecida? - vuelve a murmurar

Me volteo y lo veo,  Akin Romanov.

Sigue igual que la última vez que lo vi, con algunas canas que lo hacen ver más maduro sin dejar pasar su atractivo.

Me sonrie ladeado y abre sus brazos invitándome a abrazarlo