Parte de la locura

11- Hospital

"¡Marcelina!" La propia Dulce Princesa gritó mientras caminaba sobre los escombros de lo que una vez había sido un hermoso palacio de invierno.

"¡Marcy!" Gritó Finn también. "Marcy, ¿dónde estás? ¡MARCELINE!"

"¡Mi rey!" Una exploradora de Hielo estaba gritando, hubo un crujido que iba desde su cabeza hasta su pecho. Y aún así ella seguía llamando. "¡Por favor, mi señor!"

Jake la miró. "Amigo, él solo te usó a ti. ¿Por qué estarías buscándolo?" preguntó.

"Usado o no." La exploradora habló. "Él es nuestro rey. Nos dio vida y nos construyó un hermoso reino para disfrutar".

Un Golem asintió mientras él también avanzaba. "Incluso si él no es lo que dijo. Él es nuestro rey".

"Wenk." Respondió un pingüino.

"Así que por ahora. Trabajemos juntos". Preguntó la exploradora de Hielo. "Hasta que los encuentren al menos..."

La Dulce Princesa dio un paso adelante, sosteniendo sus manos frente a ella mientras las miraba seriamente. "Soy yo misma otra vez. Lo que significa que Marceline ha tenido éxito. Él no será el Rey del Invierno, como todos ustedes lo saben. Debería volver a ser el Rey Helado ahora".

"No conozco a este Rey Helado." Admitió la exploradora de Hielo. "Fui creado por el Rey del Invierno. Pero si en eso se ha convertido, le serviremos".

"Sí... Erhm. Tal vez quieras reconsiderar eso más tarde." Comentó la Dulce Princesa.

Mientras tanto, Finn caminaba sobre los escombros y luego suspiró profundamente mientras se sentaba. "Oh, cielos, es inútil". sostuvo su rostro. "Han sido enterrados vivos".

"Bueno... si todavía están vivos." —comentó Jake.

"¡JAKE!" Gritó Finn.

"Lo siento." Jake miró hacia abajo.

Finn suspiró de nuevo mientras miraba hacia arriba y luego se detuvo. No muy lejos de Finn, entre los escombros. Había un conejito de hielo que intentaba cavar justo en ese lugar y Finn jadeó.

Rápidamente Finn corrió hacia el conejito y cayó de rodillas, agarró un bloque de hielo y lo arrojó. Luego tomó otro y continuó.

"¿Finn?" —preguntó Jake.

"¡Aqui!" Gritó Finn. "¡Están aquí abajo! ¡Tienen que estarlo!"

La exploradora de Hielo jadeó y corrió hacia allí, agarrando un bloque también y luego se detuvo mientras levantaba la vista y miraba a Finn.

Finn le ofreció una sonrisa y luego le entregó el bloque de hielo que acababa de recoger, ella le devolvió la sonrisa y aceptó el bloque de hielo, entregándoselo a LSP detrás de ella y ella se lo pasó mientras la gente comenzaba a hacer una larga fila. recoger bloques de hielo y desecharlos más lejos.

Y luego comenzó la fila, recogiendo bloques de hielo y llevándoselos, cavando para crear un gran agujero.

Sin embargo, por cada trozo de hielo que recogieron, había mucho más. Pasaron las horas y un agujero gigante comenzó a formarse, descendiendo un largo camino, pero aún así continuaron.

"¿De verdad crees que esto es todo?" Jake finalmente tuvo que preguntar.

"Tiene que serlo", susurró Finn. "¡Marcy!" él gritó. "¡MARCELINA!"

De repente, se escuchó algo desde abajo. Los ojos de Finn se abrieron y presionó su oreja contra el suelo.

"¿Finn?" Preguntó la Dulce Princesa.