Odio

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Perspectiva de Regina

"¿Finalmente terminaste de evitarme Srta. Swan?" Sabia que su voz sonaba más áspera de lo habitual, pero en realidad no le importaba, no cuando lo único que Emma Swan ha podido hacer últimamente es evitarla a ella y su hijo.

Solo quería saber por qué la mujer tan exasperante la había estado evitando, y por qué ni siquiera podían tener una conversación normal. Pero la parte orgullosa y vengativa de ella no quería darle la satisfacción de hablar con ella, y menos cuando la escucha hablar con tanta facilidad con Zelena.

Así que luego de una plática a medias en dónde la dejo con las palabras en la boca al desaparecer teletransportandose,  pasaron varios días sin verla, hasta que se encontraron nuevamente mientras tenía una cita con Robin en el restaurante de la abuela y su interacción termina siendo como la mayoría que ha tenido en las últimas semanas con la rubia yéndose poniendo una excusa sobre ver a Zelena.

Escuha a Rubí cuestionarle "¿Dónde está Emma?"

Y normalmente Regina pondría los ojos en blanco, pero en este momento se siente molesta porque todo lo que Zelena y Rubí ahora hacen últimamente gira en torno a la rubia. Pero ninguna cantidad de molestia sería suficiente para hacerla perder la preocupación en la voz de la camarera.

Realmente no es justo. No es justo que incluso después de romperle el corazón tras tener una relación con el pirata, después de ser la mejor persona que alguien podría ser y hacer todo lo posible para defenderla de todos en este pueblo, Emma todavía tiene la audacia de aparecer en su mente cada vez que la morena se permite divagar.

Regina lo encuentra muy molesto. Emma ya no tiene derecho a hacer eso: ser la otra parte del centro de su mundo, así como robarle el sueño, ser lo que Regina más desea. Aun cuando ya tiene a Robin porque es lo que el polvo de hadas designo.

Entonces Regina está enojada. Está enojada porque odia el destino y a Emma Swan, a quien le mostró un lado de sí misma que hacía mucho no le mostraba a nadie. Amaba a esa rubia idiota.

Pero eso no significó nada. Porque se encontraba en una relación con un hombre que estaba destinado a estar con ella.

Pero a su parte egoísta eso no le importaba, no le importaban Robin ni sus sentimientos.

Entonces Regina está enojada con ella misma. Está enojada con ella por abrir su corazón otra vez, por no ser valiente para ir por lo que quiere, sintiéndose con el corazón roto.

Regina siguió pasando parte de su tiempo con Robin, lo que no es realmente una sorpresa debido a la insistencia del hombre y lo tierno que es Roland recordándole a su pequeño príncipe cuando era pequeño.

Van a muchos lugares juntos, cortesía del pequeño Roland, a veces incluso comparten una habitación. Todo es genial, de verdad.

Eso es hasta que la ve.

Porque, por supuesto, por supuesto, el destino elige mostrarle a la rubia con su hermana y, por supuesto, tiene que hacer algo para que la sangre le hierva.

La morena puede verla hablando con Zelena; no sabe cómo pueden ser tan amigas, pero se da cuenta de que no puede juzgarlas, no cuando ella también intento matar a la rubia, antes de Pan y conocer al desastroso del pirata, ah. Los buenos tiempos.

No se ven muy felices, pero cuando pasan por su mesa, Zelena le envía un guiño.

Y Regina no puede evitar sentir ganas de lanzarle una bola fuego. Deja que sus ojos se vuelvan fríos escondiendo la ira que surge en su corazón.

Ella hace mucho eso. Ella esconde. Se esconde detrás de miradas frías y palabras de odio. Porque esa es su forma de recordarse a sí misma que la mujer que ama, no la ama.

Amor no correspondido (EmmaxRegina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora