Capítulo 3; Nuevos habitantes

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Al fin llegé al colegio, aparqué la bicicleta cuando encontré un sitio y me dirijí hacia la puerta principal aún sumida en mis pensamientos. Iba andando por el pasillo principal del centro, cuando mi reflexión fue interrumpida por el peso de alguien sobre mi espalda.

-Qué...!?!?!- Pero antes de que pudiera acabar la frase, divisé un mechón de pelo pelirrojo en mi campo de visión, dándome a entender en cuestión de segundos que era mi mejor amiga, Allison.

-Hola hermana!- Me dijo regalándome una de las sonrisas que la caracterizaban.

-Hola Al, qué tal?- Pregunté.

-Pues tú que crees, es lunes! Voy a sufrir la gran depresión!- Dijo dramáticamente.

-Y por eso te has subido a mi espalda- Le contesté riéndome de la situación, ya que ella aborrecía el colegio.

-Sí, no puedo ni andar! Por favor, llévame tú a clase!- Me suplicó

-Bien, pero mañana me llevas tú!

- Bueno... Acepto el trato, Por cierto, que tal? Qué has hecho este fin de semana?

- Bien y nada en especial...

- Genial, ah oye te has enterado del notición?- En esta isla las noticias volaban ya que el único oficio que parecían tener las señoras mayores, era ir contándose las unas a las otras, y al resto de los habitantes, las nuevas noticias de las que se enteraban. Y si a este hecho se le sumaba el de que Al era una de las mayores cotillas del mundo, se podía decir que por ese motivo me acababa enterando de todas las noticias que podían llegar a cambiar la rutina de nuestra isla, mucho antes que los demás.

- No, dime. Qué pasa?- Le dije mientras recorría los pasillos del colegio con ella encima mío.

- Te acuerdas de la casa abandonada que se encuentra algo apartada del pueblo?

- La mansión?

- Sí, la que fue abandonada por sus propietarios cuando se mudaron a otro país.

- No la abandonaron, solamente no la pudieron mantener porque como tú has dicho, se fueron a vivir a otro país.

- Bueno, bueno... Sí o no?

- Sí claro, todo el mundo la conoce. Es la casa a la que nos gustaba acercarnos cuando jugábamos de pequeñas pensando que estaba encantada.

- Uy sí, pero al final ni nos adentramos siquiera en su jardín por miedo a que nos encontráramos a un fantasma o alguien que nos secuestrara i nos matara.

- Madre mía, es verdad! Pero bueno, qué me querías decir?

- A, sí! Pues aunque parezca imposible, extraño, raro, misterioso, sorprendente...

- Allison al grano!

- Entendido. Bueno, el hecho es que los dueños de la casa han vuelto.

- Enserio!?

- Sí! Y esta vez traen refuerzos!

- No entiendo.

- Bueno, para nosotras esa casa siempre a estado abandonada ya que los propietarios de ella se fueron antes de que nosotras naciéramos.

- Ya.

- Pues según me ha contado mi madre esta mañana, la vivienda, antes de que quedara deshabitada, la ocupaban una pareja y su hijo.

- Y qué?

- Pues según lo que sé, actualmente vivirán en ella esa pareja ahora con dos hijos más, la tía de los niños con sus hijos y un amigo de la familia que es considerado parte de esta.

- Vaya, la casa debe de ser enorme para que tantas personas la vayan a ocupar.

-Tú misma has dicho que se trata de una mansión y no de una casa.

- Y que pretenden, una aventura en familia?- Dije riéndome.

- Pues eso parece y ese, es uno de los hijos- Dijo apuntando a un chico que se encontraba sentado en una de las mesas más alejadas de la clase, mientras nos adentrábamos en ella.






Detrás de los sueños /PAUSADA TEMPORALMENTE/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora