Di Que Me Amas (Apolo X __)

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Al final después de pensarlo mucho no te tiraste y aun que sea el cuerpo de Apolo era a ti a quién le doleria la caída si no llegabas a pisar bien, entre todo ese dilema tratabas de recordar aunque sea un poco de lo sucedido hace unos días, pero algo bloqueaba esos recuerdos.

─Mi señor─ voces femeninas se escucharon atrás tuyo lo que hizo que voltearas a ver, eran hermosas ninjas que te comenzaron a rodear con telas de seda.

__: Es..esperen.. señoritas paren.

Ellas pararon un poco curiosas por tu actitud que no era muy del dios, te miraron fijamente como tratando de ver si era Apolo y al confirmarlo se quedaron confusas, aclaraste la garganta siendo notorio un enorme rubor en tus al ver a dos de ellas mostrando parte de sus pechos cubiertos por sus cabelleras largas solamente.

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»»--𝔸𝕡𝕠𝕝𝕠--««

Miraba el techo completamente arrepentido de todo, no había pensado bien las cosas y ahora cometí el peor de los herrores de toda mi inmortalidad. Suspiraba tanto de relajar el cuerpo ya que sentía como los músculos se tensaban.

Apolo: Los cuerpos humanos son muy fragiles.

Comenzaba a levantarme con cuidado de no lastimar el cuerpo de ____, posaba con cuidado la espalda sobre la cabecera dorada y llena de flores, tocaba las muñecas y apreciando cada cicatriz en ellas.

Apolo: No eres la mujer más femenina que e conocido, pero eso me agrada te conoces muy bien y siempre tratas de mejorar a tu propio estilo, fui un gran estúpido ¿por qué siempre me pasa esto?-

Pare de hablar sintiendo como cada rincón del cuerpo de ____ ardía de dolor, posaba ambas manos sobre sus labios mientras comenzaba a toser y toser, cuando logre parar mire sus manos llenas de sangre me alarme, limpiaba rápido las manos en unas sabanas.

─el cuerpo humano tiene un límite ¿no?─ pense dudoso ya que la sensación tan rara que sentía era anormal, mire el lugar en donde estaba la esencia de tu espada.

Me daba la vuelta para poner los pies sobre el suelo aun sentado en la cama, posaba la mano derecha sobre la pared y la izquierda sobre la costilla, cada paso era tormentoso sentía como si los órganos internos explitaran, cuando por fin llegue deje de sostener la pared para poder tocar la espada, al tocarla sintia una sensación calida exhale hasta vaciar los pulmones para luego inhalar.

Apolo:¿Acaso?

»»--______--««

__: Por supuesto queridas.

Peinabas a una de las ninfas con cuidado ya que hace tiempo que no lo hacías, sonriente era tan raro y lindo convivir con mujeres, casi nunca estabas con mujeres y era por ello que no te gustaba nada referido a la belleza o cosas parecidas, pero no se veía tan desagradable hacer eso.

Apolo: ¡____!

Miraste atrás al escuchar tu voz, viste claramente como se acercaba Apolo sosteniendo con una mano la espada y la otra las costillas.

__: ¿Apolo?

Las ninjas quedaron confundidas al verlos a ambos llamándose de la forma apuesta.

Apolo: Cu-cuando me lo ibas a decir

__: ¿Decir que?

Tiro la espada y lograste entender a lo que se refería, no quisiste hablar y por eso lo ignoraste.

Apolo: Mirame...

__: Dime -lo miraste- ¿uh? Por que estas...?

Apolo: te quedan quince años