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No tenía idea hace cuanto comenzó con esto. Se había vuelto un hábito
El recordar los labios y el sabor del chico que tanto anhelaba fue suficiente para sacarlo totalmente de sus cabales
No dejaba de recordar aquella escena repitiéndola una y otra, y otra, otra, otra, otra ,otra,otra,otra,otra,otra,otra,otra,otra,otra...Así sucesivamente hasta nunca acabar
Ni siquiera comprendió el porqué sucedió eso ni la razón, solo se encontraba tocándose constantemente cuando recordaba aquel contacto con su amado Alex
Ahora si. Estaba completamente enfermo por él
Tenía llamadas perdidas de Philza lo cual era normal, Wilbur no solía responder llamadas y rara vez lo hacía así que aunque Philza intente llamarlo, no servirá de nada
Aunque aquí fue un número desconocido el qué llamó
Aquí se atrevió a contestar lo más calmado que podía
" bueno?, quién habla?", el solo escuchar un saludo devuelta logro que se le erizará completamente la piel provocándole mucha más excitación de lo que ya tenia
– Wilbah!, Tommy me dio tu número, ya venía siendo hora de que me lo pasaras no?– Ante eso el castaño solo asintió aguantándose las ganas de retorcerse de placer... escucharasuamadoeramuchomejorquepensarlo
– Me estaba preguntando si te gustaría intentar participar en el puesto de tacos que haremos en el salón, la verdad suena bien si te lo planteas entre distintas cosas...– y mientras el azabache continuaba hablando, alguien aquí ya se encontraba duro... (q terrible)
– Entonces qué opinas?, puede ser un buen cambio de ambiente ya que siempre te la pasas calladito así que más te vale...– continúa charlando pero lamentablemente este se encontraba sacudiéndose a sí mismo... ya sabemos a qué estamos refiriéndonos
– Aunque bueno, Wilbah'!...– ese maldito apodo fue lo que le ocasionó más excitación. El castaño se encontraba jadeando silenciosamente para que el azabache no notara nada extraño ni pensara que esta demente
– pero en fin, incluso en llamada eres callado... nos vemos mañana Wilbah! – Y colgó
Después de todo lo que sucede ahora, el británico no iba a ser capaz de volver a escuchar con naturalidad la voz de su gran y majestuoso amor que lo mantenía loco
Su excitación se combinó con unas ganas de cometer algo no agradable
Así que solo siguió fantaseando con el azabache a mas no poder