CAOS Y CONTROL (Snoot Game)

CAPÍTULO N.º 3: OTRO DÍA

Esta mañana Sage me dio una galletas que según él eran de lavanda, pero no me las pude comer porque Naser se las termino comiendo sin preguntar en su típico choque matutino conmigo, eso fue molesto, esas galletas eran mi puta cena ... Luego me encontré con el "Familiar de Naser", me encanta ese nombre, tiene un pequeño toque medio bastardo, podría llamar a mi hermana "Mi familiar", el punto es que quiso hacer como si no le interesara hablar conmigo algo así como: "Sabes por donde se fueron verdad: Sudadera amarilla, pelo rojo, ya sabes, mi banda, la que toca música, del género bueno, deberías venir a vernos, ya lo hiciste, porque no otra vez, tenemos galletas, oh no, Naser se las comió." (Versión exagerada para fines comedicos) Yo solo le dije que no y me fui a clases, que mañana.

Caminando por los jardines de la escuela mientras escucho mi música, noto lo crecidas que están las enredaderas al lado del auditorio, son sabanas enteras que van desde el techo hasta la base, creo que podría trepar por ellas si me lo propongo, ya tiene tiempo que no tengo el dolor y le baje a los analgésicos, miro a ambos lados y no veo a nadie, son unos 4 pisos a lo mucho, 5 exagerando ... Sería muy cliché que un simio trepara cuando ve una liana ... Pero estoy seguro de que sería un buen escondite de la gente molesta que me busca, ocultarse de mi hermana, de Naomi, de los 3 molestos, Sage puede ser un poco intenso, Naser ... No creo que tenga ningún problema.

Me quito los audífonos y pongo a escalar y con cuidado elijo las lianas más gruesas para hacerlo, ya saben, sacrificar un agarre cómodo por mayor estabilidad al escalar, cuando estoy a casi medio metro de la cima escucho una radio barata con música country, me asomo con cuidado y la cara del entrenador simio con una gorra que le tapa los ojos sale del borde como si fuera uno de esos payasos que salen de la caja.

Entrenador: SORPRESA. - Grito ten fuerte como pudo con un acento del sur campirano.

Rick: Mierda. - Salte hacia atrás por la sorpresa.

Cuando me di cuenta, ya estaba en el aire, solo dire: mierda. El entrenador estaba con las manos a los lados de la cabeza y yo me estaba preparando para caer, he caído de lugares altos antes, pero nuca nada como este, podría rodar o ... Me estampe contra el suelo, mejor dicho, contra unos de esos arbustos espinosos de flores que amortiguaron mi cabeza, digo esto porque el resto del cuerpo llego a tocar la tierra negra que tenía debajo, rápidamente vi como el simio entrenador tomaba una silla de playa y una vieja radio y bajaba por las enredaderas con gran habilidad, escondió sus cosas detrás de algunas de ellas y vino a auxiliarme.

Entrenador: Estás bien niño, seguro que no te rompiste nada, casi te caes.

Rick: Mi cuerpo me duele, otra vez.

Entrenador: Entonces, ¿Cuántas notas de falta quieres para fingir que no paso nada?

Rick: Exoneración de la beca deportiva y una silla al otro lado del auditorio.

Entrenador: Por la beca puedo hacer algo, pero las enredaderas van a irse cuando el club de jardinería termina su mierda logística.

Rick: Me sirve.

Entrenador: Algo en particular que poner en la carta a la enfermera o en tu caso, la clínica.

Rick: Invéntate algo, me atropello un dino o algo así, eres entrenador, las lesiones te las conoces.

Entrenador: Estaré al contacto contigo.

Rick: Las plantas amortiguaron mi caída, ya estoy en tratamiento por otro tema, así que no será problema, solo a la enfermería.

El simio me ofreció una mano la cual tome y de un tirón ya estaba nuevamente arriba, me dolía un poco la espalda, pero por suerte el doctor de la clínica resulto ser el anterior mentor de Jerry y me metió en una especie de experimento en el que yo probaba la píldora en la que estaba trabajando, era un analgésico que no causaba adicción, lo de la adicción no me lo trago ni con mayonesa, pero no tuve opción debido a los múltiples accidentes que he tenido recientemente, tengan cuidado cuando abran las puertas de los autos, puede haber un idiota en bicicleta o en moto que esté pasando por ese lado, Antes de darme cuenta ya estaba en la enfermería en la que el simio me entrego a la enfermera que solo suspiro al verme, excusa barata, examen rápido, regaño por hacer estupideces y para la clase, según el reporte me tropecé en las escaleras y caí sobre algo que no recuerdo que era.