II

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Una almohada..

Una almohada muy caliente y suave pegada en su rostro. Sentía como si estuviera en una cama llena de plumas, tan suaves y perfectas.

Cálida. Esa era la palabra para describirlo. Cálida, pero a la vez blanda y algo gruesa al querés sostenerlo y cubrirse con ella . Bastante gruesa de hecho .

Estaba muy caliente. De eso no había duda. Exhalo profundo por la boca , las ganas de meterse más a fondo no faltaron y menos de cubrirse como si fuera un pequeño bebé.

Aún cerrado los ojos, estiró su mando y toco cada parte tocando lo suave que era y lo cálida que sé sentía. Era muy grande como un oso de peluche. Muy tranquilo que subía arriba y bajaba abajo lentamente muy acoplado, como si estuviera respirando.

Busco su ropa con la mirada por todos lados, no pretendía quedarse de esa manera . Busco cada parte de la cueva hasta que los encontró tendidos en el suelo con un color bastante peculiar a tierra. Con algo de dificultad y vergüenza bajo una de sus manos de sus pechos y se estiró para tomar su ropa. Rezo por dentro de que estuviera seco para poder ponérselo, pero lamentablemente estaban en un rincón totalmente mojado, lleno de barro y con manchas de sangre de su propia herida.

Parecía que un algo lo había atacado dejando toda su ropa rasgada.

Demonios!

No podía creerlo. Estaba desnuda, afuera había un viento fuerte, el bosque seguía nublado. Y para aumentar su desgracia, estaba en una cueva con un erizo antisocial y antipático que lo único que hacía todo el tiempo era reclamarle.

Se tocó la frente frustrada por su mala suerte. De todos los machos que había en el pueblo , justo le tenía que tocar la persona que más odiaba y él menos indicada para ayudarla.

Respiro profundo. Se giró un poco a otro lado para exprimir la ropa y ponérselo, pero su vos la detuvo.

____Ni pienses en hacerlo___ camino a ella mirandola sabiendo sus intenciones, cosa que no iba a permitir ___Si te lo vuelves a colocar te enfermarás e incluso tendrás fiebre y no pienso volveré a pasar por lo mismo ,Rose.____ se paró a sentimetros y se encamino a la salida para verificar si la tormenta volvería a ocurrir.

____ Entonces tráeme ropa nueva.___ hablo con aparenten molestia y desprecio ___No puedo quedarme de esta manera y menos contigo.____

Muy dentro suyo se preguntó qué hacía él azabache en esos momentos antes de que tormenta apareciera en el bosque y le causará problemas.

____ Eso a mí no me interesa___ se paró en la entrada de la salida mirando el cielo ___No te lo pones y punto. ___

___¿Que estás diciendo? Acaso quieres que me quede desnuda todo el tiempo .____ dijo indignada, lo miró atentamente esperando una respuesta de su parte , pero no. Simplemente lo vio asentir sin importancia aumentando más su enojo ___¡Estás enfermo!. No me quedaré de esta forma y mucho menos frente a ti.___

___Lo harás. De todas formas ya te he visto todo y créeme que nunca he visto un cuerpo tan plano y débil como el tuyo. ___ dijo neutro restándole importancia.

No fue su intención mencionarlo y criticar su cuerpo, pero la rosada lo había llamado pervertido. Una palabra que lo disgustó bastante ya que nunca podría propasarse con una persona débil o en una situación despavorida . Es más, nunca en su vida había estado con una de esa manera, o sentido esa clase de sentimiento frente a una hembra.

Placer.

Él lo conocía. Pero no le era muy relevante. Simplemente algo que a la mayoría de los habitantes y más incluyendo los más jovenes lo codiciaban a menudo. O eso solia ver en el pueblo cerca del río cuando las parejas necesitaban un tiempo a solas afuera de la vida cotidiana.

INSTINTO ANIMALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora