Carta de amor # 26

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Voy a la almohada confiada agradecida, feliz con la convicción de esta vida que me estoy creando.

Esta vida es la que me merezco, llena de opulencia, de Gloria, de aplausos, de amor, me comprometo a atender mis diálogos internos, esas conversaciones conmigo misma, para que siempre sean llenas de poder.

No permitiré que la duda me invada, sigo construyendo mi valía personal y no vuelvo a perder mi papel protagónico porque hay mucho trabajo por hacer, hay mucho por servir y hay miles de mujeres por despertar esos sueños dormidos que me pertenecen, son míos, son reales.

Claro que los puedo cumplir que sólo ocurrirán a través de mí.

Soy una bendición y hoy puedo levantar mi cabeza de esta almohada la que me dio descanso y almacenó mis sueños para sentirme digna.

Abro mis brazos sintiéndome digna, digna de recibir las mejores noticias.

El día de hoy, digna de recibir todos los premios, halagos, aplausos, soy digna, digna, segura y creo en mí.

Hoy me voy a crear el mejor día de mi vida, este día ha sido creado para un mujerón como yo.

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