Mi nombre es Iris tengo 18 años de edad , soy originaria de Palestina pero vivía en Turquía, fue sustraída de mi hogar a base de mentiras por una amiga de mi mamá cuando tenía 7 años.
Confié en ella porque la conocía sabía que no me iba a hacer daño y que me quería como a su hija Mirsela con la que siempre jugaba, esta señora poseía más dinero que nosotras.
Su esposo era un gran empresario, siempre que iba a su casa cuando nos invitaba, me quedaba con la boca abierta por tan grande que es y es razonable, la mía apenas tenía 3 cuartos en una horrible y vieja construcción, a pesar de las clases sociales mi madre y ella eran "amigas".
Un día ella llegó por mí al colegio diciendo que mi mamá la había mandado confiada, la tomé de la mano y no dude en subirme a su enorme auto, de verdad ese día lo lamento enorme. Nunca volví a ver a mi madre ni padre acabando en un lugar horrible dónde las niñas eran vestidas como adultas y eran tratadas peor que animales a veces no volvían y si regresaban estaban lastimadas y amoratadas o con algún hueso roto.
No fui vendida, ni prostituida solo porque Asher puso sus ojos en mi .
Odiaba ser yo, jamás supe si había carteles con mi nombre buscándome o si mi cara llegó a salir en la leche como los demás niños que se buscan.
Recibí la educación básica, el me dejó estudiar hasta preparatoria, con profesores particulares. Sabía que estaba lejos de casa, las personas que me rodeaban, su acento de voz los delataba, son italianos.
No son humanos buenos,rompen con todo lo que dice el Corán, no recuerdo mucho de mi religión, ya que mi nueva familia se encargó de criarlo desde el día que me entregaron con ellos en el manto del catolicismo. Me quitaron el hiyab y en su lugar me dieron una biblia junto a un rosario.
Aún recuerdo quien soy, aunque ellos me llamen Annie Di Marco y sea la hija perfecta que ellos moldearon al adoptarme.
Me enseñaron a cómo parar, hablar, cantar y atender un hogar sin dejar aún lado que hablo 4 idiomas. Crearon una muñeca perfecta para ser la esposa de Asher...
No tengo gran contacto con él, nunca está y aunque no me lo tengan dicho claro se que estoy destinada a estar con él. No muchos hablan de esto, solo son rumores que rondan mi "hogar" por las empleadas pero sé que él estuvo enamorado de la hija que perdieron mis padres adoptivos.
Intentan seguir con la unión de las casas.
Hace cuatro años, mientras me cortejaba paseando por los largos jardines, repletos de rosas blancas con el mar de Sicilia como fondo me atreví a hacer una pregunta.
Si él hubiera querido podría molerme a golpes por ser una entrometida, tenía todo el derecho de corregirme porque iba a ser su esposa.
Recuerdo
Relami mis labios, cuando nos quedamos parados mirando al frente, mientras las olas se rompían en las rocas de la costa, mi cabello negro era movido por la brisa marina.
—¿Cómo era ella?— fue una pregunta automática.
No tenía que decir más, ni mucho menos. Sabía a qué se debía mi pregunta. La tensión de su mandíbula me hizo saber que estoy en una zona roja.
Relamió sus labios y yo apreté los dedos de mis pies.
Me limité a mirarlo pero él no me devolvió la mirada. Se que siempre seré la sombra de un fantasma.
—No recuerdo— fue sincero—como fue, ni su voz. Pero ella fue lo que siempre amé y él me la arrebató al matarla. Nisiquiera Cosa Nostra llenará el vacío.
Asher Ferreti no me ama, solo siente una obsesión por tener de nuevo algo que la misma muerte le arrebató de sus manos.
Ama la sensación de tener de nuevo a la mujer que la vida le arrebató, por eso estoy aquí, no porque sea un hombre compasivo sino por lo que yo puedo brindarle con mi aspecto físico parecido a su amada que perdió la vida.
Hello, espero les guste estos nuevos cambios de la historia y al final decidí no es justo que este libro se quede en la sombra por el tema principal que tendrá, espero lo disfruten porque se quedara.
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PRESA ©
RomanceEntró a mi vida y se creyó con el derecho de arruinarla, solo por mi parecido con su novia muerta de años. Asher, trajo el averno a la tierra, encadenó, humilló y mató todas mis esperanzas de libertad cuando me secuestró de mi familia y me entrego a...