Una vez más

33

Entran casi corriendo al hospital, ambos tomados de la mano. En todo el camino Thiago no dejaba de maquinar ideas que eran una peor que la otra, al ver los nervios y lo mal que comenzaba a ponerse Thiago, Mar lo tomo de la mano intentando calmarlo y aunque había funcionado Thiago no podía dejar de pensar en cosas malas

-Buenas Tardes, quiero informes sobre la señora Soledad Morales - dijo Thiago apenas llegaron a la recepcionista

-No le puedo dar esa información, sin que me diga que es de ella - él suspira un momento

-Es mi expareja, está embarazada y el bebe es mío - la recepcionista asiente

-La señora entro a quirófano, le están haciendo una cesaría de emergencia, ya que a causa de la caída el feto trago líquido amniótico, el pulso del feto era muy tenue, casi no se escuchaba - el color se le fue a Thiago - La vida de la madre y del feto están en peligro

Mar, al notar que Thiago se quedó sin habla, le da las gracias a la recepcionista y jala a Thiago, lo llevo hasta una de las sillas que estaban vacías y lo sentó y después se sentó ella alado. Vio como a Thiago poco a poco se le fueron llenando los ojos de lágrimas, pero no dejo caer ni una sola gota de lágrima, en cambio, volteo a verla y pudo ver el enorme dolor que le causaron las palabras de la recepcionista

-Tranquilo, debes de ser positivo, Thiago, tienes que ser fuertes - él negó

-Es que no lo entiendes Mar... He sido un gran hijo de puta con ella. Comenzando desde hace cinco años, fui yo quien no fue sincero al decirle que era hombre comprometido, fui yo quien la busco una y otra vez, después de que vos te fuiste. Yo fui un gran hijo de puta al burlarme de sus sentimientos cuando me lo confesó, fui yo el que se enojó cuando me dijo que estaba embarazada, fui yo, el que deseo que ese bebe que venía en camino no existirá. Fui yo el que deseo todo el tiempo, que esto no fuera real, que ella no fuera la mamá de mi hijo, fui yo el que se la paso comparándola con vos. Y a pesar de todo, ella siempre a estadio ahí, comprendiendo, dándome mi tiempo para asimilar las cosas, para aceptarla a ella y al bebe. Todo esto es un castigo Mar

Mar tenia un enorme nudo en la garganta, por el dolor que le provocaba verlo asi y por todo lo que había, dicho. Mar nunca fue de culpar a Soledad por lo que había pasado tantos años atrás, pero le fue inevitable el sentir un poco de coraje al verla embarazada y de la mano del hombre que ella aún hoy en día amaba tanto. En aquella boda de su hermana, le tuvo incluso hasta envidia, creyendo que ella había ganado, se había quedado con él y en sima estaban formando una familia, la cosa cambio cuando Thiago le dijo lo que realmente pasaba. Y le fue inevitable el sentir tanta pena por ella, por qué llevaba años viviendo bajo la sombra de su recuerdo de un hombre que sin duda no la sabia valorar.

No supo que decir y el nudo en su garganta se lo impedía, asi que sin saber que más hacer, tomo la mano de Thiago y le dio un leve apretón, tratando de trasmitirle calma, también sabía que en estos casos ninguna palabra que le dijera serviría, pues, él estaba lleno de remordimiento, culpa y temor

-Eres un descarado, mi hija y nieto debatiéndose entre la vida y la muerte y vos... Traes a una de tus tantas zorras - dijo una señora de mediana edad, parada frente a ellos, Mar despego su cabeza del hombro de Thiago, este se paró quedando a la par de la señora

-Modere su vocabulario, señora y respete - dijo Thiago tensando la mandíbula, Thiago podía soportar cualquier cosa, pero jamar soportaba que le faltaran al respeto, a la mujer que más ha amado

-Es que eres un descarado ¿Cómo le puedes hacer esto a mi hija? En estos momentos - él negó

-Está confundida Macarena, comenzando por qué Soledad y yo no tenemos nada, solo nos une nuestro hijo y eso su hija lo sabe, segundo por qué Mar no es eso que usted dice, ella solo me está acompañando en esta situación