𝐄𝐧 𝐎𝐭𝐫𝐚 𝐕𝐢𝐝𝐚

𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 16

En este momento todos nos encontramos en nuestros cuartos mientras Sanji estaba arriba haciendo guardia para no perdernos, se hicieron cambios de cuartos en el primer pasillo solo estaba yo, en el segundo pasillo estaba el cuarto de Nami y Sanji. En el piso de abajo estaba el cuarto de Usopp, Luffy y Zoro. No se del por qué se hicieron esos cambios, estaba tirada en mi cama pensando en que hacer con la fruta si tirarla, venderla o comerla era una decisión que no se podía tomar a la ligera así que tenía que pensar muy bien

-Ay se me olvido recoger los productos de higiene.

Me acordé apenas pero ya estábamos muy lejos como para decir que regresamos a la isla solo por esa caja, me puse de pie y salí de mi cuarto para ir a fuera y decirle a Sanji que fuera a descansar.

-Hola

-Keiko pensó que estabas dormida.

-No podía dormir

Me acerque a la orilla del mar mientras veía el cielo que no tardaba en amanecer, amaba ver el amanecer y atardecer aún que lo que más amaba era ver la luna en una noche despejada rodeada por las estrellas

-Keiko

-Dime, Sanji

-Perdón, no te lo había dicho pero me porte como una idiota el otro día, confiaste en mi contándome todo lo que sentías por Zoro y yo solo me puse borracho y conté todo dejándote con una pena que tal vez aun tengas. Créeme que no soy así, ese día solo me deje llevar por el alcohol y paso todo eso; no sabes cuanto me he estado recordando eso y regalándome a mi mismo. En verdad perdón Keiko

Lo tome del hombro para que me viera a los ojos

-No te preocupes de los errores se aprende y creo que si no hubieras cometido ese error yo no me hubiera acercado a Zoro como ahorita, no hubiera visto a mi hermana y seguiría Hana en este barco y estaría en riesgo sin saberlo. Al contrario Sanji gracias por que sin ti no había sabido nada de lo que paso

-Gracias Keiko

Lo abrase ya que aún que si me hizo sentir mal era mi amigo después de todo, el fue el que me hizo olvidar a Zoro cuando estaba con Hana haciendo que por un momento todo fuera muy bien.

-Ve a descansar, me quedaré haciendo guardia en lo que despiertan todos

-¿Estás seguro?

-Si ya tienes

El se fue y me volví a quedar viendo el amanecer hasta que escuché pasos en las escaleras pero no me importaba prefería ver el cielo y el aire de la mañana, sentí como Zoro redeo mi cintura con sus brazos y puso su cabeza en mi hombro.

-Pensé que estabas dormido

-Desperté hace un rato y pensé que aún estaba el cocinero aquí para pedirle que me preparara algo.

-No el se fue a dormir mientras yo hago guardia - Me di la vuelta para quedar frente a él y recargar mi cuerpo en el barandal del barco- ¿Quieres que te prepare algo?

-¿Sabes cocinar?

-Claro que si, aprendí después de estar por 19 años cuidando de Aiko

-Entonces si

Me dio un beso que era de amor a diferencia de los demás, puse mis manos en su cuello para que el beso no se termine; nos alejamos al mismo tiempo y tomamos aire para después reír y bajar la cabeza

-Te iré a preparar algo

-Te acompaño no me quiero quedar solo

- Entonces ¿Quién cuidará del barco?