CHISPAS DEL CORAZÓN

Capítulo 3

Sinfonía de Sentimientos

A medida que la conexión entre Bakugo y Midoriya se intensificaba, los dos héroes se encontraban en una danza delicada de emociones. Cada encuentro, cada mirada compartida, parecía tejer un hilo más fuerte entre ellos.

En una tarde soleada, decidieron tomarse un descanso de la academia y explorar los alrededores de la ciudad. Caminaron por parques, visitaron cafés pintorescos y compartieron historias sobre sus vidas antes de convertirse en héroes.

Sentados en un banco en un tranquilo rincón del parque, Bakugo miró el cielo azul. Las hojas crujían bajo sus pies mientras Midoriya compartía anécdotas sobre su infancia.Midoriya: "Recuerdo que solía mirar las nubes y pensar en convertirme en un gran héroe, ¿sabes? Era mi sueño desde siempre."Bakugo gruñó, pero su mirada estaba lejos de ser despectiva.Bakugo: "Todos teníamos sueños estúpidos de niños."Midoriya rió, pero la risa se desvaneció en un suspiro melancólico.Midoriya: "A veces, me sorprende lo lejos que hemos llegado. Y ahora... esto."Bakugo asintió, sintiendo una extraña mezcla de nostalgia y anticipación.Bakugo: "Las cosas han cambiado. No puedo simplemente ignorar lo que está pasando."Midoriya: "Yo tampoco puedo. Y no quiero."

La confesión flotó en el aire, dejando a ambos héroes en un silencio cómplice. El parque estaba impregnado de una tranquilidad especial, como si el mundo exterior se desvaneciera, dejando solo a Bakugo y Midoriya en su pequeño universo.

En días sucesivos, la rutina de entrenamiento continuó, pero ahora, cada ejercicio, cada enfrentamiento simulado, estaba impregnado de una nueva intensidad. Bakugo y Midoriya luchaban como siempre, pero algo en la forma en que se miraban entre sí sugería que la batalla estaba ocurriendo en un nivel más profundo.

Una tarde, después de una sesión de entrenamiento particularmente agotadora, decidieron relajarse en la azotea de la academia. El sol se ponía lentamente, tiñendo el cielo de tonos dorados y rosados.

Bakugo: "Esto es estúpido, pero... siento que cada vez que te miro, algo cambia en mí."Midoriya asintió, como si entendiera perfectamente lo que Bakugo quería expresar.Midoriya: "Es como si estuviéramos conectados de alguna manera. Como si nuestras historias estuvieran entrelazadas."Bakugo gruñó, sintiendo una mezcla de incomodidad y asombro.Bakugo: "No soy bueno en estas cosas. Todo esto... es raro."Midoriya: "Lo sé, Bakugo. Pero a veces, lo raro es lo que hace la vida emocionante."

La declaración quedó suspendida en el aire, dejando a ambos héroes en un silencio reflexivo. Mientras el sol se ocultaba por completo, una nueva fase de su historia comenzaba a desplegarse.

En una noche estrellada, Bakugo y Midoriya decidieron participar en una misión de entrenamiento nocturna. La luna llena iluminaba el campo de entrenamiento mientras se enfrentaban a hordas simuladas de villanos.

Durante la intensa batalla, Bakugo notó que su instinto protector se elevaba cuando Midoriya estaba en peligro simulado. La idea de perder a su compañero de entrenamiento de alguna manera le resultaba insoportable.

Después de la misión, ambos héroes se encontraron descansando en la hierba, mirando el cielo estrellado.Midoriya: "Fue una buena pelea. Aunque solo fueran simulacros, siento que nos conocemos mejor en situaciones como estas."Bakugo gruñó, pero no por enojo. Estaba comenzando a aceptar que había algo más allá de la mera rivalidad entre ellos.Bakugo: "Es difícil explicar lo que siento, pero... no quiero que te lastimen. No puedo evitar sentirme responsable de eso."Midoriya sonrió, reconociendo la sinceridad en las palabras de Bakugo.Midoriya: "Creo que estamos más conectados de lo que pensamos. Y no solo en la lucha, sino en algo más profundo."

La conexión entre ellos se volvía cada vez más evidente, como una melodía que resonaba en el fondo de sus vidas. En la academia U.A., los compañeros de clase notaban la extraña complicidad entre Bakugo y Midoriya, pero ninguno de los dos héroes estaba listo para dar una explicación clara.

Una tarde, mientras caminaban por los terrenos de la academia, Midoriya miró a Bakugo con seriedad.Midoriya: "No podemos seguir ignorando esto, Bakugo. Hay algo especial entre nosotros, y no sé exactamente qué es, pero..."Bakugo: "Lo sé. También lo siento."La confesión mutua colgó en el aire, creando una atmósfera cargada de expectación y, tal vez, un poco de miedo.En una noche tranquila, decidieron explorar sus sentimientos de una manera más directa. Se sentaron en la azotea, mirando las estrellas, y la pregunta que ambos habían estado evitando salió finalmente.Midoriya: "¿Qué somos, Bakugo?"Bakugo frunció el ceño, pero esta vez no era por molestia. Era una pregunta que ninguno de los dos sabía cómo responder, pero ambos estaban dispuestos a enfrentarla juntos.Bakugo: "No tengo ni idea, nerd. Pero estoy dispuesto a averiguarlo."

La respuesta de Bakugo fue recibida con una sonrisa de Midoriya, como si ambos estuvieran de acuerdo en que esta nueva fase de su relación era un terreno desconocido, pero emocionante.

Los días siguieron su curso, y Bakugo e Midoriya se aventuraron en esta nueva etapa de su historia. En la academia U.A., donde la vida estaba llena de desafíos y sorpresas, los dos héroes descubrieron que las chispas que una vez simbolizaron rivalidad ahora iluminaban un camino desconocido lleno de posibilidades.