Debería haberme planteado que talvez el chico de mirada linda era un psicópata y por eso quería saber de mí, quería matarme, pero era tan lindo que no podría así que solo puse mi cara de confusión y olvide el detalle que estaba afuera mojándose, cuando lo recordé abrí la puerta y lo mire
-¿Que...- hable pero ni siquiera dejo que terminara
-Me llamo Harry Edward Styles, mi mama se llama Anne, mi papa Dess, tengo una hermana llamada Gemma y un hermano llamado Ian, papas divorciados, vengo de Londres, me dieron una beca y vine a estudiar, extraño a mi familia pero siempre hablo con ellos, mi vida es aburrida, hay pocas cosas que enserio me llaman la atención, tengo 24 casi 25 años, decidí estudiar psicología porque enserio quiero ayudar a la gente a que tenga un motivo para seguir adelante, eso es lo que me motiva a ayudar gente, quiero ser tu amigo, no tu psicólogo, no solo quiero tener una relación de trabajo, te lo dije en la tarde, cada que hablo contigo quiero saber más y más sobre ti, cuando te quedas callada sé qué piensas en algo y me gustaría saber lo que es, pero odiaría que me lo contaras como una relación de paciente-psicólogo, quiero que confíes en mí, quiero ser tu amigo, enserio quiero serlo y aquí estoy mientras pensaba en lo que me decías hace un rato, sobre nuestra relación, jamás querría que nuestra relación se basara en terapia, quiero que confíes en mi- y respiro, salieron tantas palabras de su boca que pensé que jamás pararía
-Primero que nada, creo que no soy una buena amiga y enserio creo que tú eres una buena persona-
-Tú eres una maravillosa persona, el hecho de que tú no lo veas es diferente- dijo y sonrió
-Bueno, me parece bien que seamos amigos pero que estés mojado y goteando sobre la alfombra de mi amiga no hará que te defienda cuando llegue y se enoje- le sonreí y señale el charco, el volvió a salir hacia la terraza pero lo detuve -Podrías quedarte hasta que acabe la lluvia, no quiero que mi nuevo amigo se enferme y tenga que cuidarlo-
-Buen punto, aunque yo no me opondría con que me cuidaras, solo deja me quito los zapatos- como sus calcetines estaban escurriendo, opto por quitárselos -siempre me ha gustado andar sin zapatos, me siento libre- rio y dejo su impermeable afuera -Jamás pensé en traer otro cambio de ropa, hubiera sido grandioso pensar en todo-
-Si quieres usar la secadora de pelo aunque sea para secar tu playera, está en el baño- señale y fue hacia allá, cerró la puerta y agarre las botas para ponerlas en un ventilador -¿Todo bien?- grite y se escuchó algo caerse
-¿Podrías ayudarme?- pregunto y yo conteste un sí, oh definitivamente debí tocar, allí estaba el, sin playera, solo con sus bonitos y mojados pantalones, tratando de prender la secadora, me acerque y lo ayude, trate de no mirarlo pero fue imposible, cuando se prendió, salí casi corriendo y espere afuera por si necesitaba algo más -Del 1 al 10 ¿Cómo estoy?- grito y yo sonreí al instante, ni siquiera necesitaba que estuviera afuera para sentirme incomoda y nerviosa, talvez lo hubiera visto un poquito más, no creo que se diera cuenta que lo veía -¿Tan bueno estoy que no encuentras el número más alejado? Bueno, te ayudare- salió con esa sonrisa suya -Infinito-
-¿Infinito? ¿Cómo estás? Eres un egocéntrico- solté una risa y el hizo cara de indignación
-Ambos sabemos que soy una persona agradable y linda aparte que mi atractivo físico no es cuestionable- se sentó en la orilla del sillón y se veía que su camisa aún estaba mojada ¿Son cuadros? ¿Hará ejercicio?
-Eres agradable, de eso no tengo dudas- sonreí y me senté en su dirección -¿Los extrañas mucho?-
-Sí, pero trato de distraerme lo más posible para no pensar en ellos y por eso tome a una paciente de la Sra. Thomson, bastante linda para ser honestos- rozaba su mano con su barbilla y me miraba, esos ojos son tan encantadores -Y ahora dejaste de ponerme atención y te perdiste de mi gran discurso-
-Oh por dios, no me di cuenta, lo siento- tape mi cara con el primer cojín que encontré y reí, volví a distraerme, sus ojos son los responsables -es tu culpa-
-Yo no hice nada aunque me gustaría saber en qué pensabas- pregunto y yo me quite el cojín para mirarlo
-No, definitivamente no quieres saberlo- negué y se escuchó abrirse una puerta, ambos volteamos y vimos a Gaby entrando y gritando su clásico "Llegue" me levante y fui hacia ella, el chico de ojos bonitos nos siguió
-Llegaste temprano- dije y ella sonrió viendo en dirección del chico de mirada linda
-Si, hoy no habia tanta gente y me dejaron salir temprano pero pensé que estarías sola- señalo con sus ojos y entendí
-Cierto no se conocen, Gaby él es el chico de mir...- me calle en el instante que me di cuenta que no había dicho su nombre sino el apodo que yo le había puesto, jamás le dije por su nombre, para mí era el chico de mirada linda, no su nombre... ¿Su nombre? ¿Cuál es su nombre?
-Ajam ¿El chico de Mir? - pregunto Gaby y yo me quede pensando en que su nombre era lindo y empezaba con H, Harry, ese era su nombre
-¿Siempre es así?- cuestiono el chico de mirada linda y yo pestañee varias veces tratando de entender
-Uy y eso que apenas la conoces, se va y no regresa hasta que le digas otra cosa- comenzaron a reír y trate de hacer cara de indignación pero acabe riendo
-No siempre soy así, no es algo que quiera que me pase- me encogí de hombros
-Quiero saber en qué piensas- dijo el chico de mirada coqueta y recordé la presentación
-Gaby, él es Ha...rry - suspire y seguí -Harry, ella es Gaby, la chica de la alfombra- sonreí y señale con la cabeza, Gaby miro y subió una ceja, este chico es lindo así que dude que ella quisiera golpearlo
-Hola Harry, pasare la alfombra solo porque eres agradable-
-Gracias, Anna me lo advirtió pero no pude evitarlo- me miro e hizo una de esas sonrisas suyas, Gaby nos miró con esos ojos suyos de borrega soñadora, alce una ceja y me guiño un ojo -Bueno creo que es tarde y debo ir a cambiarme o enfermare y Anna tendrá que ir a cuidarme y darme sopa caliente hasta que mejore- se dirigió hacia sus zapatos y se los puso de nueva cuenta, después se despidió de Gaby y al último lo encamine hacia la puerta y cuando estaba a punto de irse soltó -¿Cuando me contaras sobre ti?-
-¿Cuando? Pues cuando quieras que te platique sobre mí- le sonreí y entrecerró los ojos
-¿Mañana? En la cafetería, después de tu turno ¿Te parece?-
-Bien, salgo a las 10- volví a sonreír y el me la devolvió
-Allí te veo, nos vemos- y se acercó a besar mi mejilla, me sonroje y se despidió con la mano -Me encanto haber venido y verte otra vez- y se fue, dejándome sin habla, solo con una sensación en mi estómago, un revoltijo y no sabía si era bueno o malo pero ese chico en verdad estaba
empezando a agradarme...
ESTÁS LEYENDO
Ángel suicida (Harry Styles)
Teen FictionAnna es una chica aburrida de su vida de todo lo que le rodea, piensa que la soledad es su única amiga y que no tiene a nadie, esta en el punto donde prefiere terminar con la arruinada vida que tiene a seguir soportando los obstáculos de la vida, su...