Mañana no saldrá el sol

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Y la mañana del lunes llega..

Me despierto menos adolorida que ayer, más que mañana. Siempre es así, siempre la misma historia, siempre lo mismo.

Cade me tiene acurrucada en su pecho, Bianca me abraza por la espalda, no puedo sentirme más segura, inténto alcanzar el despertador pero el cuerpo de Cade me lo impide

-Cade-Le susurro al oido, luego más fuerte - ¡Cade! Apaga el despertador..

Cade despierta desorientado y me toma del brazo, lo que me hace chillar del dolor. Bianca se incorpora instintivamente y Cade me suelta de inmediato

-Ann, lo lamento, no me di cue...

-Déjalo así- Digo con lágrimas en los ojos, no se si de dolor o pena

Me levanto y me encierro en el baño, es está definitivamente la peor parte de todo el "evento", al paso del tiempo decidí llamarle el "evento", nunca he sabido por qué.

Me paro frente al espejo, tengo el pelo revuelto pero eso no es lo peor, tengo un ojo completamente morado y aún hay restos de sangre entre mi nariz y mis labios. Me lavo la cara con agua muy fría, pero no me siento mejor luego de que la sangre se ha ido; me desenredo el cabello con los dedos hasta que se ve decente. Luego de darme una sonrisa poco convencida me quito el camisón de Bianca, quedando desnuda frente al espejo. 

Comienzo a llorar nuevamente, no de dolor, no de pena, lloro de rabia, de odio.  

Todo mi cuerpo está lleno de hematomas, mi llanto descontrolado produce espasmos tan fuertes que me duele todo el cuerpo, respiro con dificultad mientras busco cuántas partes de mi cuerpo no se vieron afectadas, un pedacito en la espalda baja, la parte de atrás de mis rodillas, las axilas, la parte frontal del cuello, y la cara excepto por el ojo. Todo lo demás es como una gran mancha morada algo verdosa. 

"Toc toc" 

Alguien toca la puerta

-¿Annie?-Es Bianca- Ann abre la puerta

-Ya voy-Contesto con un hilo de voz, pero no puedo despegar los ojos del espejo

Comienzo a llorar nuevamente, de a poco me deslizo por la pared del baño hasta quedar en el suelo, Bianca entra al cabo de un rato

-Si quieres podemos quedarnos aquí- Me dice

-Tendría que quedarme en casa un mes

--o--

Al salir de la ducha envuelta en una toalla reviso el bolso que Cade había me había traído cuando estaba en el hospital, tomo unos vaqueros y una remera de pabilo, en el fondo del bolso veo a mi vieja compañera, mi chaqueta de cuero. Me pongo la remera que escogí para poder soportar el calor de andar con chaqueta todo el día y luego con mucho cuidado me pongo la chaqueta y los pantalones. Cuando Cade sale del baño le pregunto

-¿Qué tal?

-Como si nunca hubiese pasado-Responde apenado

Suspiro, él suspira, luego nos damos las espaldas y seguimos haciendo lo nuestro. Tomo unos lentes de sol de Bianca que me pongo luego de una capa de maquillaje.

Al final nos juntamos todos en la puerta con el tiempo justo para llegar en buena hora al instituto. Bianca maneja, yo voy adelante y Cade atrás. No emitimos palabra en todo el camino.

Me siento mal, me siento culpable, culpable de que mi padre me halla golpeado, culpable de que Cade y Bianca lo estén pasando mal, que estén preocupados por mi, culpable de la muerte de mi madre, culpable de existir... Culpable. 

Detras de sus ojos [En pausa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora