El Plan Perfecto

Un segundo intento

En la grabación del celular de Honami se veía claramente como una chica de coletas bajas dejaba en el asiento de Emu una carta en forma de corazón para posteriormente salir de forma rápida antes de que otras chicas entraran al aula. Emu al ver quién dejaba las cartas no sintió su curiosidad bajar, de hecho, solo aumentaba.

-¿Kohane-chan? ¿Porqué le gusto? Casi ni hablamos...y sus cartas son muy románticas...dulces...y además...es como si ella conociera todo de mi, en cada una de ellas es como si supiera exactamente que escribir para hacerme sentir cómoda y feliz...-

-Emu-chan...si no hablan mucho, ¿Eso no quiere decir que te acosa?-

Emu alzó la cabeza en dirección a Honami con mirada sorprendida.

-Honami-chan eso da miedo...pero si talvez sea verdad...¿¡Kohane-chan es así!? Nooooo...y yo que quería ser su amiga...-

-¡Que hacemos Emu-chan..!-

La castaña se detuvo pensando un poco mejor.

-Mejor dicho, ¿que harás?- Señaló el pupitre con la carta encima.

-¡Porque Honami-chan! ¡Porque me dejas sola en esto..!- Exclamó de forma triste y dramática mientras se tapaba el rostro.

-No es muy difícil que digamos...solo debes rechazarla directamente, puedes citarla hoy en la azotea y decirle lo que viste en la mañana,dile que ya no quieres que deje cartas en tu asiento,  que no la quieres de esa forma y preguntar si pueden no volverse a ver nunca más, que ella olvide todo y que sus pobres sentimientos no correspondidos se vuelvan parte de una pequeña cápsula de memoria en su interior, los cuales solo recordará con una mezcla de dolor  y ya no con aquellas emocio...-

-¿¡Honami-chan como podría ser tan mala con ella!? Rechazarla así sería como un balde de agua fría para ella...y además pedir eso es la peor forma de desperdiciar una buena amistad...-

Honami inclinó la cabeza de lado al procesar lo extrañamente sabia que sonó Emu.

-¿Huh? Pero así siempre rechazan al mal tercio de un triángulo amoroso en los k-dramas que veo...-

-¿Que clase de k-dramas ves Honami-chan?-

Emu vio a Honami por varios segundos de forma un poco asustada.

-...Bueno Emu-chan, volviendo al tema principal, ¿que harás?- Repitió Honami esperando a que Emu respondiera.

-¿No lo sé? Me imagino que lo diré directamente, pero de manera amable, y le pediré si podemos ser amigas!-

-No suena mal...bien Emu-chan,  recházala de la mejor manera!

-Claro que sí ¡Whahahaha!-

-Emm...disculpen...¿pueden hacer un poco de silencio? Casi que nadie oye de lo que están hablando...- Murmuró de forma sarcástica.

Era una alumna, compañera de ambas chicas, la cual intervino en la situación entrando al salón para posteriormente sentarse en su puesto. Emu y su compinche estaban rojas de verguenza de que alguien hubiese escuchado su conversación, la cual era muy fácil de oir debido al tono de voz que empleaban.

-O-Oh, sí...¡lo sentimos!- Dijo Honami bajando su cabeza e hizo lo mismo con Emu ya que ella parecía seguir avergonzada.

Estudiantes seguían entrando al aula y finalmente entró su lincenciado de Matemáticas a dar clases por las próximas dos horas escolares, luego entró su Maestra de Lectura, lo cual aburría bastante a Emu, pero aun así dio todo por no quedarse dormida y cuando porfin salió a receso fue directo a buscar a Kohane.

-"Donde está Kohane-chann...."-

Desesperanzada. Emu subió a la azotea de la academia con vagas ganas de que Kohane esté allí, lo cual resultó ser cierto, Kohane estaba ahí, sentada leyendo lo que parecían ser letras musicales.