Una Historia Diferente [Winx Clud]

Capítulo 13

POV SKY

Me daba gracia verla dudar por cual cubierto usar, se acercaba a coger uno sólo luego quitaba su mano y se iba a por otro. Lo peor es que primero lo hacía bien y luego se iba por el incorrecto.

Niego divertido.

— Puedes usar el que quieras, pero si quieres saber cuál se utiliza, es este —le señaló uno que tenía lado de su plato.

—Gracias, en la tierra no se acostumbra a exigir a la gente a tomar clases de etiqueta —me daba ternura al verla sonrojarse.

—Aquí las personas que pueden, se toman clases de etiqueta o modales básicos, pero a los que son de la realeza o personas de alto rango, para ellos si es obligatorio —explicó— yo como me crie con el príncipe Sky, se algo del tema

—Ya veo.

—Y dime, ¿cómo te está tratando la dimensión mágica? —le doy un bocado a la comida y luego de pasarlo, continúo— ¿Era lo que esperabas?

—La verdad, es que no era ni cerca a lo que imaginaba.

La observo con atención esperando a que diga más.

—En los libros que leía sobre mundos mágicos, subió mis expectativas, esperaba ver: unicornios, hadas pequeñitas, dragones, sirenas, minotauros, rodeados de naturalezas, animales raros, viviendo todos en armonía; aunque, aún me sorprende ver a chicas que parecen personas normales, usando magia o a mi profesor transformándose en un conejo, el resto parece de lo más normal. Las brujas no tienen la piel verde, nariz puntiaguda o vuelan en escobas; las hadas no son seres pequeñitos, chillones, revoloteando por ahí; su ciudad principal es como cualquiera de la tierra, claro quitando que sus vehículos vuelan.

—¿Decepcionada de lo que ves? —preguntó mirándola a los ojos mostrando una sonrisa ladeada.

—No tanto —su sonrojo me hace sonreír más.

—Si te sirve de consuelo, sirenas sí que hay por aquí, son de Andros, el reino de tu amiga, la princesa Layla. Los unicornios, también existen, pero no se dejan ver casi; los minotauros, sí que existen, pero no salen mucho de su reino, son discriminados aquí. En la dimensión mágica, nos regimos de monarquías, por eso hay muchas personas de la realeza y en todos lados existe el mal, ningún lugar se salva —trato de explicar lo más resumido posible, pero la veo con ganas de escuchar más.

—E injusticias también, mi amiga contó cuando murió su mamá, los reyes de ese reino, ignoraban que su gente moría, se aprovechaban de los impuestos y con eso se daban vida de lujos, lamentablemente su madre falleció, no tuvieron posibilidades para darle los medicamentos necesarios.

—Melodía, si escuche sobre la crisis que pasó hace años, era tan solo un niño en ese entonces, pero recuerdo que mi padre me contaba que tuvieron que aislar ese reino, para que no se disperse por las demás naciones; un montón de personas murieron, mandaron ayuda de otros reinos, pero les dijeron que los reyes no recibían caridad —aún no podía creer como había gente tan egoísta, un verdadero rey, pone primero a su pueblo antes que a él mismo.

—Son unos egoístas.

—Si.

Nos quedamos un momento en silencio, no de esos incómodos, más bien me sentía relajado. Tampoco forzado al sonreírle como me lo exigían todo el tiempo. Sentía que era yo mismo y eso me agradaba mucho.

Terminamos de comer y le dije para ir a caminar por el parque, como para que los dos estemos en nuestra zona de confort y se sienta cómoda sin mucha gente.

Le ofrecí la mano para guiarla afuera y no la solté, así caminamos hasta el parque muy tranquilamente.

—Y cuéntame más de la tierra, aquí no nos enseñan mucho de allá, más bien es un lugar prohibido para los seres mágicos.