Capitulo 3: El Luto y la Esperanza

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Tú entras en esta parte ¿huh?

Sep, tenía unos seis... siete más o menos.

Seis...

Si, si seis.

¿No te preocupaba que le pasara algo a Jotaro?

Claramente, si, pero nada malo pasó... es lo que importa.

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El cuerpo de Raphael fue tirado al fuego.

No era una práctica poco ordinaria y era principalmente para que los Krang no tomaran los cuerpos de sus muertos y usarlos. Mientras menos, mejor.

A Donnie le había costado salir de su mente durante la primera semana después del suceso y tuvo que hablar con Leonardo junto con Mikey. Se prometieron ayudarse entre ellos, ser una familia, no tomar decisiones por separado.

Ni Donatello ni Mikey fueron obvios en su pena con respecto a Raphael ni tampoco le reprocharon su muerte a Leonardo a pesar de que no sería algo ilógico. Decidieron seguir con sus vidas a pesar de todo...

Michelangelo dejó de ser un ninja, enfocándose en su maestría en lo místico y por ende dejó de usar su máscara mientras que Donatello se enfocó en crear más y mejor tecnología, más de lo que era.

Lo que más dolió con la pérdida de Raphael y de Cassandra fue la reacción del pequeño Casey. El pequeño se encerró en su mente y perdió su voz por un buen tiempo. El niño, a sus cinco años perdió a su madre, a su padre y vivía en unas condiciones menos ideales, pero tenía a Usagi y a Leonardo.

ue Leonardo quien le dijo lo que habia ocurrido, que le pedia perdon ya que fue su culpa, pero cuando Casey lo escucho no dijo nada, solo le veia con aquellos ojos negros profundos pero sin la inocencia infantil que solia tener.

Eso destrozó a Leonardo por dentro y como Raph era el padre oficial de este pequeño, lo menos que podía hacer era cuidarle como lo haría él.

No fue fácil, sobre todo considerando que el pequeño ya no hablaba y era completamente diferente a como era antes de la pérdida. Estaba retraído y tímido con todos, para nada como el niño al cuidado de Raphael, pero no se rindieron con él.

Leonardo se sentía muy culpable por el cambio de actitud de Cass, pero Usagi le quitaba un peso de encima cuando el conejo le trataba como siempre, contándole historias y colocándolo en sus piernas cuando comenzaba a hacerse de noche. El pequeño a pesar de no poder decir nada, disfrutaba de la compañía de ambos, Leo y Usagi. Él rōnin seguía sintiéndose cálido como siempre y Leonardo seguía haciéndole reír a pesar de que no lo parecía a simple vista.

Las semanas fueron pasando y Donatello terminó enseñando lengua se de señas de la manera más básica posible para que pudiera comunicar lo básico.

Si tenía hambre, si tenía sueño, no lo iban a obligar a hablar con sus palabras, pero debían saber sus necesidades y eso a Casey le pareció bien al no sentirse presionado. Donatello si fue amable a su manera al momento de enseñarle, era sorprendentemente bueno con los niños a pesar de su poca racionalidad el podía leer muy bien a los pequeños.

Casey en las mañanas era llevado por Leonardo en sus brazos al baño, luego a la cocina donde el menor movía sus manitos informando que tenía hambre. A veces la comida escaseaba, pero los adultos siempre pensaban en él a la hora de sus necesidades. Usagi se quitaria de la boca para darle a Casey y la verdad es que todos los demás también.

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⏰ Última actualización: Nov 26, 2023 ⏰

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Si Uno De Nosotros Muere | LeosagiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora