Pov: ______
Okey... esta es mi cuarta noche acá, y aún no puedo sacar de mi cabeza el momento casi algo íntimo de Elizabeth y yo.
Cuando llegué a casa mi madre me había dicho si tenía fiebre o algo por lo roja que estaba.
Pero bueno, ya dejo de hablar de eso.
Esta vez Elizabeth llegó primero, no quise asustarla esta vez porque me estaba empezando a caer bien.
— Hola. — La saludé moviendo mi mano.
— Hola. — Contestó algo desinteresada.
— ¿Cómo... estás? — Pregunto.
— ¿Te importa? — Me miró de la misma forma en que había contestado.
¿Otra vez insoportable?
— Olvídalo.
— Cómo digas.
Me sentí algo mal porque pensé que por fin podríamos llevarnos bien.
No le tomé más importancia y decidí ver las cámaras aprovechando que ella estaba haciendo... absolutamente nada.
Fuí a la cámara 11 y la cosa que mantenía la caja activa estaba a punto de acabarse.
Tomé el control de la mano de Elizabeth con algo de brusquedad.
— ¡Ten más cuidado! — Apartó su mano de mí.
Presioné el botón — ¿Y ahora a ti que te pasa? Ayer estabas bastante normal y ahora vuelves más insoportable que nunca.
— ¿Crees que soy insoportable? — Pregunta levantándose de su silla y acercándose considerablemente a mí.
— E-em un...un poco sí. — Noté que su rostro estaba muy cerca del mío y me hice hacia atrás con mi silla.
— ¿Estás nerviosa? — Rió en un tono coqueto.
¿Acaso quiere matarme?
— N-no...— Respondí, ¿Por qué demonios estoy tartamudeando?
Sonrió de lado y se sentó de nuevo en su silla.
— Solo no tuve un buen día, es todo. — Dijo respondiendo a mi anterior pregunta.
— Está bien. — Acerqué de nuevo mi silla hacia ella.
Volví a ver las cámaras y al parecer ahora tengo que mantener presionado ese estúpido botón toda la noche, bueno...madrugada.
Esa cosa baja muy rápido.
— ¿Que te parece esta pizzería? — Me pregunta de la nada.
— Creo que es...genial, mi primo a cada rato quiere venir. — Contesté.
— ¿Quien es tu primo? — Voltea a verme y yo también lo hago.
— Billy, su nombre es Billy.
— ¿Es el chico que siempre viene disfrazado de Foxy?
— Sí, es el. — Digo riendo al recordar lo chistoso que se ve con ese traje.
— Una vez hablé con él, no sabía que era tu primo. — Coloca su brazo en su pierna y sostiene su mentón con una mano.
Que atractiva.
—No siempre estoy con él cuando está aquí. — Crucé mis brazos.
— Sería genial verlos juntos. — Cambió su posición y ahora estaba colocando sus dos brazos a sus costados sujetándose de la silla.
— Sí, supongo...
— Hey, ¿Todo bien? — Posó su mano derecha en mi hombro.
— ¿Ah? Sí, tranquila, todo está bien. — Me quedé en blanco por unos segundos y luego sentí una respiración cerca de mi cara.
Era Elizabeth, claramente.
— ¡Oye! Te dije que no hicieras eso. — Me quejé alejándome de su rostro.
— ¿No hacer que?
— ¡Asustarme! — Dije como si fuera lo más obvio.
— Ya bueno perdón. — Se rió un poco.
— ¿Es posible que salgamos de acá? Quiero ver cómo es la caja en persona del muñequito ese.
— No creo que sea correcto.
— No tardaremos, ven. — Tomé su mano y la arrastré hacia la habitación de la marioneta.
Ella se dejó guiar por mí hasta que llegamos a la habitación.
— Es más grande en persona. — Mencionó en un tono de sorpresa.
— Vaya que lo es. — Respondo en el mismo tono.
— Vamos a ver al muñeco. — Tomó mi mano de vuelta y me llevó hasta la caja.
— Está alta, no puedes saltar.
— Usaré cualquier cosa. — Deja mi mano y va hacia una de las cajas vacías y coloca cuatro, una sobre cada una y se monta en ellas.
— Ten cuidado Elizabeth. — Advertí.
— No me pasará nada, estate tranquila. — Cuando intentó abrir la caja la marioneta salió de esta como en los antiguos juegos. Y me di cuenta que no había llevado el control.
— ¡AAAAHH! — Soltó un fuerte grito al ver sido asustada por la marioneta.
Se resbaló de las cajas y reaccioné a tiempo atajandola.
La tenía en la posición conocida como “Princesa” mientras que ella se sostenía de mi cuello con sus dos manos.
— Te dije que tuvieras cuidado Elizabeth. — Dije algo molesta.
Volteó su mirada para verme — No sabía que iba a saltarme de la nada.
— La próxima ten más cuidado por favor, no quiero que te pase nada malo. — La dejé con cuidado en el suelo y ella se puso de pie.
— ¿Por qué no? — Pregunta en un tono burlón.
— Porque me quedo sin compañera. — La dejé con la palabra en la boca y me fuí de ahí.
Cap 4 listo
Mañana actualizo, tengo varias ideas.
—Isaac.
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Security (Elizabeth Afton y tú)
Fanfiction____ es nueva en el trabajo de vigilar animatrónicos por la noche, pero también tiene una compañera que no le cae muy...bien. Las dos tendrán que llevarse bien si quieren sobrevivir al trabajo y a los animatrónicos asesinos (basada en Five Night At...