CLAUDIA Y MAXIMILIANO

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Claudia llegó recargada después de estar casi un mes recuperándose para enfocarse en la empresa junior que tienen que aperturar. Llegó al apartamento, se instaló y cuando se acomodó decidió llamar a Max.

¡Ey, Max! ¿Cómo estás?

- Hola Clau. Bien, bien y tú? ¿Cómo te fue?

Bien gracias Max, a ti no te puedo mentir. Sí recargue lo suficiente pero mis visiones está siempre presente una silueta y me tiene intranquila.

- Cálmate Claudia, quizás solo sea cosa tuya, además en mucho tiempo esto no tiene porqué interferir en ti.

Tienes razón Max, dime cómo vas con lo que te encargué ¿Haz hecho la tarea?

- Te diré lo siguiente, hay diez perfiles muy buenos para el puesto, que te parece si lo hablamos mañana en tu apartamento ¿Qué dices?

¡Perfecto! Gracias Max, te espero acá a las diez de la mañana.

Al parecer todo transcurre sin ningún altercado Claudia le está dando prioridad a su firma aunque por momentos tiene presente aquella visión, de igual forma ella había prometido que las personas que aparecieran de manera premonitoria no terminarian como María José que aunque sobrevivió, tuvieron que hacerle un barrido mental del cual todo recuerdo de Claudia desapareció, algo que para ella fue doloroso porque en verdad llegó a amarla. Claudia se preguntaba si todo el tiempo su vida sería de esa forma, si jamás llegaría a perder la razón por alguien a quien amar, el sentir tener a alguien con quien en realidad ser ella sin necesidad de esconderse y mucho menos de ocultar sus orígenes.

De repente suena el móvil y es Max.

Hola Calu.

Hola Max, ¿Qué pasa?

Clau, te acuerdas que me pediste que dentro de los jurídicos estuviera alguien que tuviera conocimientoen Derecho Internacional. ¿Sí te acuerdas?

Sí, sí claro. Fui específica en eso.

Okay, de los diez postulantes que te comenté solo hay una, para mí es una novata apenas, aunque para tener 25 años se ha desempeñado muy, muy bien.

¡Ja, ja, ja! Ahora juzgas por la edad ¿Eh?

Clau, algo que se destacar es el tiempo de la personas en esta vida ¿No te parece?

Entiendo, bueno te espero en mi apartamento mañanas las diez, ¡bay!

¡Bay, mi Clau!

Definitivamente el que Maximiliano sea la mano derecha alivia un poco las cargas, aunque el momento de volver a enfrentar la realidad está siempre latente. Claudia ha quedado intrigada por lo que le ha dicho Max, pero esperara hasta mañana para saber con exactitud quién será la joven.

Mientras Claudia se relaja y se dirige a su baño preparado y coloca su canción favorita. Save Me de Zero un clásico de clásicos.

CONTIGO PUEDO SER YO REALMENTE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora