(MTL) Apuestas de piedra en el interestelar

66-71 final

Capítulo 66: La carrera por el tiempo

Cuando llegaron a su destino, el sol en el planeta ya estaba a mitad de camino por la ladera de la montaña, pero para ahorrar tiempo, Scythia y Hills decidieron no esperar más para entrar en el vasto bosque que cubría más de dos tercios del planeta. Por supuesto, esto no es el resultado del perro saltó por encima de la pared y no tenía otra opción. Por boca de Scythia, este poderoso híbrido ya ha superado al humano más poderoso que tenía delante para entrar en el undécimo nivel. Según las propias palabras de este bastardo, si no fuera por algunas secuelas que le dejó la prueba original y que le hicieron incapaz de enfrentarse a la bestia de frente, me temo que ya habría cogido el cañón de un arma y se habría ido a luchar sin vida.

A este respecto, Ángel, que estaba presente en aquel momento y tuvo el honor de contemplar la escena en la que una de las grandes leyendas de la federación pronunció estas palabras, dijo que el ideal es muy rollizo, la realidad es muy huesuda, y al ver a la bella estallar con un lenguaje tan soez, ¡se desilusionó en el fondo de su corazón!

Pero, naturalmente, no dijo estas cosas en voz alta. Estos días ni siquiera podía preocuparse de sus propios asuntos ¿cómo iba a tener tiempo para preocuparse de lo que le ocurría a los modales de Saisia?

Caminando por el bosque densamente cubierto de plantas espirituales, Angel suspiró levemente y de forma imperceptible.

Si no estuviera en el punto de crisis de la vida y la muerte, él y Hills esa pequeña cosa que realmente no podía ocultar.

No sabía cuál era su actitud hacia Hills. Inconscientemente se apoyaba en Hills, y la inexplicable confianza que había existido desde que se conocieron le había estado incitando a seguir acercándose. Creía que Hills tenía que gustarle. Pero cuando realmente se enfrentaba a un problema así, retrocedía y dudaba. Seguía enamorado de aquella ternura infalible, pero tardó en abrir la boca para responder.

"Esto es todo, depende de ti decidir a qué lugar ir primero. Aquí hay un total de cinco plantas espirituales de undécimo grado, lo que ya es una proporción enorme. Si no fuera por el hecho de que este lugar está demasiado cerca de la Estrella Imperial, me temo que sería el primer paso para que ese tipo se hiciera con el control." Scythia detuvo sus pasos, levantó la mano para secarse el sudor inexistente de la frente, cruzó los brazos con una mano y miró a Hills con una sonrisa en la cara, al parecer viendo a éste como el líder supremo.

Sin siquiera dejar a Scythia con un resquemor, Hills, que caminaba al final de la fila, alargó la mano y le entregó a Angel agua desatornillada haciendo un gesto para que éste la juzgara.

No tenía intención de presionar demasiado. Tal vez fuera porque había estado un poco agitado por las recientes circunstancias que aquel día había parecido tan ansioso por exigir una respuesta. El corazón que aún estaba un poco inquieto había empezado a alegrarse, en cambio, de la aguda prueba de aquel día después de ver la reacción de Ángel en los últimos días. Al menos, había pasado de la evasión a la consideración, ¿no?

Asintiendo agradecido a Hills, Ángel sondeó ligeramente su poder espiritual para empezar a sentir.

No estaba lejos de ninguno de esos cinco lugares, y el poder del rasgo lo penetraba todo para contactar fácilmente con el otro lado.

No tenían mucho tiempo, así que Hills y él no tenían intención de traer las cinco plantas espirituales. Sólo necesitaban la ayuda de tres plantas espirituales.

"Directamente al norte, sureste y suroeste". Frunciendo ligeramente el ceño, Ángel nombró los tres lugares con reacciones más amistosas.

"Con el debido respeto, si estamos intentando que esta Bestia Bola Rodante avance hasta la madurez, la que más necesitamos debería ser la del este". Levantando una ceja en señal de sorpresa, Scythia insertó una sonrisa.