mi gran secreto(harry y ginny)

capítulo 2

El tiempo había pasado rápido ya llevaba un tiempo en Rumania y mi pancita empezaba a notarse Charlie era muy atento conmigo y mi bebe, pero no estaba mucho tiempo en casa por sus estudios con los dragones,  los primeros meses me sentía fatal por el engaño de Harry, muchas veces estuve a punto de enviarle una carta para que se enterase del bebe, pero tuve la suficiente fuerza de voluntad para no hacerlo, los vómitos y mareos eran bastante frecuentes al igual que los antojos que ciertamente eran bastante confusos. Los meses fueron pasando y los médicos me decían que el bebe estaba sano y fuerte, hablaba casi todos los días con mis hermanos quienes me contaban los chismes y  cosas que pasaban por allá, mi madre me aconsejaba sobre el cuidado mío y del bebe decía que tenía que cuidarme y comer bien, de poco pasaban los días y mi pancita cada vez era más notoria, mi ropa favorita me quedaba ajustada o ni siquiera me quedaba, me causaba gracia el verme con la blusa subida por mi pancita. El bebe daba fuertes patadas que me hacían sentir mariposas y aleteos en mi vientre, muchas noches no pude dormir, ya que ninguna posición me parecía cómoda y terminaba pasando la noche en vela pensando en que hubiera pasado si me quedaba en la madriguera, si le hubiera contado a Harry, pero hacía desaparecer esos pensamientos cuando leía los libros de la casa de Charlie, poco a poco los meses fueron pasando e Hiba llegando la fecha de la llegada de mi bebe, mi madre apenas le comente empaco maleta y vino aquí,  con su llegada no me sentí tan sola, pero aun así lo seguía extrañando a él, a sus caricias y besos  aunque fueran mentiras me hacía sentir bien, al que más extrañaba era al padre de mi hijo que a de estar con  la perra con la que me engaño o con cualquier otra puta que se le atravesara por el camino, el hecho de que sea el padre de mi hijo no significa que le perdone el daño que me hizo aunque extrañe su tacto no soy capaz de perdonarlo. Mi madre vino de visita a verme y no me dejaba hacer ningún esfuerzo ni cargar nada, ya que pronto se daría la llegada a un nuevo miembro en la familia weasley. Estaba en sala leyendo un libro cuanto sentí una fuerte punzada en mi vientre junto a una especie de líquido bajar por mis piernas.

-aghhh, mama ven!!!!!-dije asustada viendo el líquido bajar por mis piernas

-que pasa hija, que tienes -pregunta mi madre preocupada 

- me duele-le dije señalando mi pancita, pero volví a sentir un fuerte dolor. Las contracciones regulares comenzaron no son muy fuertes pero igual duelen

-¡hija es el bebe!!!! Ya a de estar en camino-dijo mi madre

-pero como, si aún faltan algunas semanas-dije agitada aguantando los dolores que sentía

-puede que se esté adelantando la fecha-dijo mi madre emocionada

-sí, eso veo-dije jadeando, mi madre rápidamente llamo a la madriguera para avisar que pronto llegaría el tan esperado bebe, tiempo después la escuche hablando con el doctor, el doctor le dio unas indicaciones a mi madre mientras que llegaba.

-hija el doctor dice que llegara pronto, pero que mientras tanto vayamos a un sitio cómodo para el parto-dijo mi madre ayudándome a levantar

-hija ven, vamos a tu cuarto-me dijo- el médico no demora en llegar-  con leves quejidos, llegamos a mi habitación y mi madre me ayudo a recostarme. Mi mamá me llevo a mi cuarto y me dijo que Charlie luego vendría.

-mama por favor que me traigan agua -dije como podía

-si claro hija -dijo para luego hablar con una de las señoritas que nos ayudaban en la casa-tranquila hija, respire como te lo indico el doctor... toma mi mano-sujete su mano con fuerza respirando como era debido.

Las punzadas eran cada vez más fuerte, no sé si tenía miedo,  alegra o si estaba nerviosa. Pronto sentí un fuerte dolor en la espalda y abdomen.

-el agua, la maldita agua-dije entre un fuerte gemido de dolor por una contracción que dio mucho más fuerte.

-hija, el doctor acaba de llegar -dijo mi madre entre preocupación y emoción

-buenas tardes, señora weasley, vamos a empezar, tranquila ya que todo va a salir bien, voy a asegurarme que el bebe esté bien-dijo el doctor mientras se acomodaba, venía con todo el equipo, otra especie de doctor y 3 enfermeras, me hicieron un chequeo rápido para ver si el bebe estaba sano.

-está todo bien?-dijo mi madre con cierta preocupación

-al parecer....está todo bien, el bebe se ve completamente sano-dijo el doctor.

Las contracciones se hicieron cada vez más fuertes, haciéndome casi gritar de dolor. Tomaba con fuerza la mano de mi madre

-en menos de 5 minutos estará lo suficientemente dilatada, ya casi es la hora-dijo el doctor

-tranquila hija, aquí estoy  aprieta mi mano con fuerza que todo va a estar bien-dijo mi madre dándome un beso en la frente

el dolor incrementó y las contracciones se sentían ridículamente dolorosas.

-es hora, necesito que empieza a pujar, ya está la dilatación necesaria-dijo el médico, note como las enfermeras iban alistando todo para la llegada de mi bebe, comencé a pujar, dolía mucho, dolía demasiado

-muy bien, mi niña, lo estás haciendo muy bien...-dijo mi madre mientras que yo apretaba su mano con todas mis fuerzas, puje por más o menos 30 minutos de dolor inexplicable. Puje con todas mis fuerzas hasta que escuche su llanto, sus sollozos, su hermosa vocecita.

¡Mi bebe ya había nacido!!!!!!

Estaba exhausta, mi madre volteo a ver a mi bebe con emoción y ternura para luego devolver su vista a mí, tenía mi cabeza sobre mis almohadas, estaba agotada.

-muchas felicidades señora weasley.....es un hermoso niño-nos dijo la enfermera envolviendo a mi bebe ya limpio en una mantita mientras me lo entregaba poniéndolo sobre mi pecho  al   bebe que aún seguía llorando, pero en cuanto lo pegue a mi pecho se calmó. Era hermoso, abrió sus pequeños ojitos mostrándome unos hermosos iris color avellana, su cabellito era negro como el de su padre y su piel era blanca como la leche.

-Eliot, Eliot Potter. Ese será el nombre de mi amado hijo-dije emocionada, ya que por fin mi tan esperado niño había nacido.