Narra Zelda
Estaba durmiendo tambien caundo de la nada empece a escuchar muchos ruidos en la habitación, cuando desperte la habitación estaba a oscuras, encendí la luz de la lámpara y pude ver a Sarah, estaba en el piso buscando algo de su maleta.
- Sarah? Estas bien?
Sarah - Si! No te acerques por favor *dijo con la voz temblorosa*
- ¿Qué ocurre? *Toque su espalda y ella puso sus manos en su rostro*
Sarah - Zelds por favor, vete, no quiero que me veas asi *dijo con un tono lloroso, me senté delante de ella y pude ver sus manos, más blancas y largas de lo normal, sus uñas tambien habian crecido,me tomé el atrevimiento de tomar una de sus manos, pude sentir el como Sarah se tenso*
- No te voy a juzgar, lo sabes, por favor déjame verte *dije con un tono calamado*
Sarah - En cuanto me veas vas querer irte.
- Nunca me iré de tu lado, por favor déjame verte *comencé a bajar sus manos lentamente y pude ver su rostro, su piel más blanca de lo normal, sus ojos eran amarillos, parecía más alta, sus orejas puntiagudas, sus uñas más largas, sus labios más rojos y tenía más cicatrices por su cuerpo, ayer no estaban, limpie sus lagrimas con mi dedo pulgar y ella cerro los ojos* nunca me voy a ir, no pienso dejarte sola, si? *después de eso la abrace, pude sentir el como me tomó de la cintura, sus uñas se clavaban un poco pero no me molestaba*
- Dime que buscas, te ayudare
Sarah - Sangre
- La guarde en el mini bar * me levante y tome dos bolsas, se las di y me di la vuelta, solo escuchaba el como absorbía la sangre*
Sarah - Puedes voltear, no tardare mucho en ser más o menos normal como antes.
- Siempre has sido normal
Sarah - No me hagas esto por favor
- Hacer que? No entiendo.
Sarah - Por favor no mientas, yo se que una parte de ti me detesta *dijo con lagrimas*
- En que momento te hice pensar eso? *Pregunté ofendida*
Sarah - ¿En serio lo olvidaste? *dijo con ironia*
- Muéstrame, en que momento lo hice
*ella me miró unos segundos,después tomó mis manos y me hizo ver uno de sus recuerdos, estábamos en la escuela, era de noche y ella estaba con sangre en su boca y ropa, me vi, pude ver como le dije que era un monstruo y más cosas horribles, después de eso me solto*
- Yo nunca dije eso, ve mis recuerdos por favor *tomo mis manos y a los segundos me solto*
Sarah - Tu, tu nunca lo hiciste pero... Blackwod, fue su culpa.
- Blackwod? No entiendo Sarah
Sarah - Cuando estábamos en la escuela, tu... tu me gustabas y Blackwod tenia un claro interés en ti, recuerdo que el siempre decía idioteces pero después de ese recuerdo el me dijo que eras suya y que tu me temias por eso me fui, aparte de la pela.
- Sarah, yo... yo nunca te he temido, ni siquiera odiado, tal vez si estuve sentida por que te fuiste y no me dijiste nada pero, tu también me gustabas, me gustas en realidad *dije mientras miraba mis manos* y Blackwod nunca pero nunca me ha gustado, solo lo respeto por que es el sumo sacerdote. *ella guardo silencio y decidí mirarla, estaba un poco roja de las mejillas, no se si por llorar o por lo que dije* pero tu me debes una explicación, al final de los comates el consejo dijo que se mantenia tu hechizo de protección hacia mi, por favor explícame.
ESTÁS LEYENDO
mi bruja favorita - Zelda Spellman
RandomSarah Arnault conocida por ser la mejor bruja de los tiempos,suma sacerdotisa de su aquelarre tiene una gran debilidad hacia su ex compañera de la academia de brujas, Zelda Spellman.