mi bruja favorita - Zelda Spellman

12 - Casa

Narra Sarah

Estamos frente a la puerta de la casa, tenía la mano de Zelda, ella iba a entrar pero antes la jale hacia mi y le di un beso al separarnos ambas sonreímos, puse mis manos en su cintura acercándola un poco más

- Tengo una duda, le dirás a los demás acerca de nosotras?

Zelda - En realidad tenía pensado en hacer una cena y contárselos hoy

- Bien *dije con un tono nervioso*

Zelda - No estes nerviosa, ellos te adoran y lo sabes

- Si, es cierto

*Zelda me dió un pequeño beso y sonrió, después entramos a la casa*

- Ya llegamos! *Dijo Zelda, entramos a la cocina y no había nadie, subimos a las habitaciones y estás estaban vacías, bajamos al estudio de Ambroes*

- Hola Ambrose *dije mientras me acercaba a el*

Ambrose- - Tías, ¿cómo les fue en su viaje?

- Bien pero dónde está Sabrina y Hilda *pregunto Zelda*

Ambrose - No lo se tía *contesto nervioso, estaba nervioso, que ocurrió*

- Ambroes, no mientras, puedo escuchar tu corazón latiendo ¿Dónde están y que ocurrió? *Dije con seriedad*

- Bueno...

*Ambrose nos contó acerca de que Sabrina hizo necromancia, revivió al hermano de Harbie pero el actúa muy raro, sacrificaron a Dorcas en la fosa de resurección de los Spellman pero Dorcas está muy mal y Hilda fue a cuidarla pues nadie sabe que hacer, todos subimos a la sala de estar, esperando a Hilda y Sabrina, cuando llegó Hilda, Zelda explotó*

Zelda - No lo puedo creer, eras tú la responsable de estos niños y ahora me entero de todo lo que sucedió!

Hilda - Yo tampoco sabía, me enteré por qué Prudence vino a pedir ayuda y me conto todo.

*Mientras ellas discutían me acerque a Ambrose*

- No te ha llegado alguna carta

Ambrose- - No tía, ¿por qué?

- Curiosidad

...

- Tía Hilda, ya llegué *dijo Sabrina mientras acomodaba su suéter en el perchero, al girarse nos vio* Tía Zee, Sarah, ¿Qué tal su viaje?

- Sabrina *llamo Zelda captando la atención de su sobrina* me puedes explicar el por que realizaste necromancia, de donde sacaste ese hechizo, necesito una explicación!

Sabrina - Conseguí el libro de la oficina de la señorita Wardell

Zelda - Esto debe ser una broma, arruinar el equilibrio entre los mundos,todo lo que hiciste lo empeorará.

Sabrina - Eso no es cierto Tía Zee, iré al limbo y rescatar el alma de Tommy, el estará bien al igual que Agatha.

Zelda - Acabo de terminar con mi última credibilidad para salvar a esta familia, hable con Blackwod para que no te sacara de la escuela o peor, evitar tu muerte.
Eres una niña de 16 años que no sabe lo que hace!

Sabrina - No soy una niña Tía Zee y tu no eres mi madre, no podrás manejarme todo el tiempo!

- Sabrina! *Hable con seriedad mientras veía a Zelda*

- Oye! Esa no es forma de hablarle a tu tía *Regaño Hilda a Sabrina*

Zelda - Tranquila Hilda, Sabrina ya es una adulta es hora de que entienda el como se manejan los reinos y sus peligros. *Dijo Zelda para después ir a su habitación, Hilda se dirigio a la cocina*

Ambroes - Nadie te ayudará Sabrina, te equivocas y mucho. *Contestó Ambroes mientras caminaba a su habitación*

Sabrina - Tía Sarah, por favor ayúdame *suplico Sabrina*

- Sabrina, yo... te ayudaría en otras circunstancias pero no lo haré, esta vez estoy de acuerdo con tu Tía Zelda, así como tuviste el valor de esconderlo tendrás el valor de solucionarlo sola. *Subí a la habitación de Zelda y toque la puerta, no hubo respuesta, cuando iba a abrirla Hilda subió por las escaleras*

- No me abre la puerta *le comente a Hilda*

- Yo abro *Hilda saco una llave y abrió la puerta, Zelda se estaba flagelando, inmediatamente me acerque a ella y le quite el latigo*

Zelda - Nos equivocamos Hilda, nunca debimos aceptar que Sabrina se quedara con nosotras, debimos aceptar que la familia de Diana la cuidara  pero todo fue por mi arrogancia.

Hilda - Tranquila Zelda, ya fue suficiente *abraza a su hermana* te traere un te y hablaremos un poco, si? *Zelda solo asintió, en cuanto Hilda salio de la habitación abrace a Zelda, ella empezó a llorar*

Zelda - No se que hice mal, tal vez fui una mala madre *me separe de ella y tome sus manos*

- Nunca digas eso Zelds, tu y Hilda fueron las mejores madres para Sabrina, no la justifico pero es una adolescente y ahora cree que todo es fácil, si?

*Zelda volvió a asentir con la cabeza*

- Te curare cielo *le di un beso en la frente y fui a mi habitación para poder curar a Zelda, tome el algodón y agua oxigenada, volví a entrar a la habitación de Zelda, me senté en la cama, frente a su espalda, moje el algodón con agua oxigenada* Esto arderá un poco cielo *pase son cuidado el algodón y ella comenzó a quejarse, me detuve y tome su mano, seguí limpiando y ahora yo sentía su dolor,Zelda me solto y se giro*

Zelda - No hagas eso, no quiero que te duela algo de lo que no tienes culpa.

- No me importa, no quiero que sufras, además tienes unos pequeños rasguños que si fueron mi culpa, así que déjame curarte, dame tu mano y obedece brujita *Zelda hizo lo pedido y yo continúe con mi trabajo, cuando termine de limpiarla la ayude a vestirse y a los minutos Hilda entro a la habitación, yo baje a la sala y llame a mi aquelarre*

....

Toc Toc

- Pasa Zelds *dije mientras acomodaba mi ropa en el ropero, Zelda me abrazo por la espalda y solté mi ropa, me gire y la abrace* ¿estás bien?

Zelda - Si, esperare a Sabrina, supongo que no tarda mucho en volver, hablaré con ella.

- Esta bien, si necesitas mi ayuda estaré aquí

Zelda - Gracias Sarah *me dio un beso de picó y salio de mi habitación*

....

Hilda - Le hice un bálsamo a Sabrina para el corazón roto

Zelda - Yo se lo daré *Zelda lo tomo y subió a la habitación de Sabrina* tu tía Hilda te hizo un bálsamo para el corazón roto, frotarlo tres veces al día en tu pecho *comento mientras lo dejaba en la mesita de noche*

Sabrina - No quiero dejar de sentir, quiero que Harbie deje de sentir *Zelda se sentó en la cama junto a Sabrina y acaricio su espalda de manera reconfortante* irás a la escuela, participaras y tomarás notas, regresaras a casa, irás a la escuela de la noche y después regresas a casa, comeremos juntas y hablaremos de más cosas.

....

Al día siguiente Sabrina fue a la escuela y le contó todo a sus amigas, ellas la consolaron y Sabrina intentaba evitar a Harbie a toda costa, en la escuela de la noche.

- Como te encuentras Brina *pregunté*

Sabrina - Un poco mejor tia, aunque tengo algunas dudas.

- Te escucho

Sabrina - Cuando estaba en el limbo, mi mamá estaba ahí pero no entiendo el por qué.

- Puedo ayudarte en eso sí quieres

Sabrina - Por favor.

....