In The Middle

Ahogar

Esa noche salí de la residencia de Kim.

Después de que pueda abrir la puerta del auto. Ella estaba corriendo hacia mí.

" ¿¡ Adónde vas!?" ella me preguntó.

"¡ Oh! ¡Olvidé pedirte permiso !" Dije sarcásticamente.

"¿¡ Cuál diablos es el problema, eh !?" Simplemente me giré y la miré.

"¡Pregúntale a tu prometida!" ella se detiene en seco.

Ella solo sacudió la cabeza.

"¿ ¡Lis!? Tengo muchas preguntas sobre qué pasó esta noche, el momento en que te tomaste 30 minutos para ir al baño, la forma en que hablaste con Bam, ¡¿y ahora ésta?!"

"¿ ¡Qué me estás ocultando!?" preguntó, pero yo solo la miré.

Ella se acercó, se acercó a mí y acarició mi rostro con su palma. Y simplemente cerré los ojos. Su mano es tan suave.

Ambos nos asustamos cuando escuchamos abrirse la puerta de entrada. Ambos nos distanciamos.

Era el Sr. Kim acercándose a nosotros.

" Que esta pasando aqui !?" dijo con una mirada inquisitiva.

"¡ Nada papá! Lisa y yo solo estamos hablando de algo, regresa allí y ya vuelvo". simplemente tiene esta angustia en su rostro y sube las escaleras hasta la puerta abierta y la cierra.

" Ven conmigo !" Le dije con súplica mientras alcanzaba su mano para agarrarla. Ella simplemente inclinó la cabeza y soltó mi mano.

Ya se resume.

" No puedo y ¿¡lo sabes Lis!?, simplemente no puedo." ella simplemente retrocedió un poco...

Abrí la puerta del auto y saqué mi bolso.

Busqué mi bolsillo y le di las llaves del auto.

" Deja que tu prometida te lleve a casa, ¿¡de acuerdo!?" Le dije sonriéndole.

"¡ No! ¡Toma el coche !" dijo poniendo las llaves.

"¡ No! Jennie, tú eras dueña del auto y yo solo soy un empleado, sería extraño si lo tomara"

" Solo diles que me enfermé o algo así" su cara estaba al borde de llorar.

"¡Oye! ¡No llores, estoy bien, no te preocupes por mí!" Toqué su rostro y le limpié una lágrima que caía por su rostro.

" Celebra con tu familia, te deben estar esperando en estos momentos".

"¿¡Lisa!?"

" Sólo me estoy poniendo en el lugar que me corresponde, Jen". Me puse el bolso al hombro y comencé a caminar por el camino de entrada.

Cuando estaba a punto de acercarme a la puerta. Una sola gota de lágrima cayó sobre mi mano. No sabía que todavía soy capaz de llorar

. Lo limpio con el dorso de mi mano y pasé por la puerta que automáticamente se abre y luego se cierra.

Mientras estaba parado afuera de la puerta. Todavía puedo ver a Jennie parada a lo lejos. Sosteniendo la llave del auto. Ella simplemente bajó la cabeza.

Luego se da vuelta. Alguien abrió la puerta. Era su prometido que bajó las escaleras y le puso la mano en el hombro y ambos subieron las escaleras, entraron y cerraron la puerta.

Me quedé allí hasta que la puerta se cerró de golpe.

Caminé pasando la cuadra desde la casa de Jennie hasta que paré un taxi.