La Venganza que nos une [BORRADOR]

Capítulo XV

Dalia

Ya hacia un tiempo que habíamos regresado a nuestra vida cotidiana, bueno, incluyendo el hecho de que ahora vivía con Felix y Bobi

Debo admitir que nunca me había sentido más feliz de estar junto a alguien, sentir amor era lo último que espere experimentar y vaya sorpresa que me dio la vida, ahora estoy junto a la persona que amo y con la que espero pasar el resto de mi vida juntos

Ahora mismo me encuentro en la Universidad junto con Amaya, el tiempo pasa volando y ya estoy a mitad del semestre, sin duda las cosas están yendo muy bien para mi, tanto que aun no creo sea verdad

Amaya, era increíble, tenerla cerca me agradaba, la amistad era algo que no esperaba vivir pero con ella me siento a gusto, también tengo una mejor conexión con Giulia y aunque lo niegue se que hasta me tiene un gran cariño

Es increíble el paso del tiempo, pero hace 8 meses no imaginaba estar casada, ni tampoco viviendo la vida que siempre imagine, la libertad que siempre desee estaba a la vuelta de la esquina y haría todo lo que fuera por conseguirla

Pero siendo sinceros quizás mi deseo de venganza sea descartado, estar junto a Felix es lo que más anhelo, vivir junto a él talves sea lo que siempre quise y no necesite de la venganza para ser libre y vivir plenamente

El timbre sono haciendo que todos entraramos a nuestras clases correspondientes, el día seria un poco ocupado pero me emocionaba la idea de pasar el día con Felix, esa era mi motivación en este momento

Las clases acabaron haciendo que como ya era normal tuviera que esperar a Felix en la entrada para ambos volver a nuestro hogar

A lo lejos lo divise saliendo del auto, corri hacia el uniéndonos en un corto abrazo, abrió la puerta del auto esperando a que subiera la cual cerro cuando ya estuve adentro

Ya nos encontrábamos de regreso al departamento, Felix aparte de recogerme llevo tambien un ramo de flores con él, es extraño, pero, últimamente me trae diferentes regalos cada vez que me ve. Me gustaba que lo hiciera, pero, las cosas materiales nunca me importaron, yo era más de demostrar afecto