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Rosie se despertó en su dormitorio, alguien la trajo de regreso ahí en la noche. De repente,Recuerdos inundaban su mente.
Charles.
Remus.
Todo.
Pronto descubrió que Charles estaba en la enfermería, Rhea le había contado. Su hermano James se enteró y lo golpeó.
¿Y cómo estaba de vuelta en su dormitorio? Era Remus.
En el desayuno, Rosie estaba tranquila, no hablaba con nadie.
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—¡Silencioooo! Dumbledore grito. Al llamar la atención de todos, todos detienen lo que estaban haciendo y esperan su discurso.
—Buenos días ... ¡Estudiantes, ya que saben que habrá un baile el próximo fin de semana! ¡Buena suerte al encontrar a sus parejas!
Tan pronto como Dumbledore terminó su discurso, todos saltaron y vitorearon con emoción. Remus aterrizó sus ojos en Rosie quien estaba en la mesa de Hufflepuff, sus palmas sobre sus mejillas y sus codos descansaron sobre la mesa.Su corazón se rompió al verla triste. Ella se levantó y caminó hacia los Merodeadores.
—¡Rosie! ¿Cómo estás? Estaba tan preocupado —dice James en un tono preocupado—Estoy bien gracias —le responde Rosie con el ceño fruncido. Todos los Merodeadores se miraron entre sí. Silencio, solo había silencio incómodo. Sirius fingió toser para luego hablar hacia Rosie.
—¿tienes una cita para el baile? — Preguntó Sirius
—Todavía no —sonrió Rosie, el tema del baile la hizo sentir feliz. La música, los vestidos, el baile, el jugo de calabaza, todo lo relacionado con el baile para ella era increíble.Remus sonrió a sí mismo.
—Ahí está mi pequeña hermana, estás sonriendo de nuevo. —dice James, que la abraza y se apartaron.
—¿podemos evitar hablar de lo que pasó anoche? Si está bien por ustedes... —comento que la joven y se dio vuelta para marcharse
—Por supuesto —dijeron todos juntos —No hablaremos de eso —Remus le aseguró. Ella le sonrió suavemente cuando él le habló rápidamente.
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